Tratar los problemas familiares puede ser una experiencia agotadora.
Son muchos los factores que hay que tener en cuenta en el proceso: las emociones, las experiencias, las perspectivas y las condiciones individuales influyen. A estos factores se añade el hecho de que hay que considerar a todos los miembros de la familia.
Todo esto hace que los problemas familiares sean más difíciles de tratar. Hay casos en los que una familia necesita ayuda profesional.
Índice
¿Qué ocurre en la terapia familiar?
La terapia familiar es una forma de terapia dirigida a padres, hijos, matrimonios o familia extensa.
El objetivo principal es ayudar a las familias a identificar las áreas problemáticas y a resolver de forma saludable estos problemas.
La terapia familiar facilitada por un consejero experimentado puede ayudar a unir a las familias. Además, puede reforzar el vínculo entre padres e hijos.
Al principio podría parecer muy abrumadora para los pacientes implicados. Sin embargo, hay un flujo que muchos terapeutas siguen. Los pasos a seguir suelen ser los siguientes:
Comprender: El terapeuta intentará en primer lugar comprender la situación en cuestión. También procurará evaluar y obtener una estimación de las personalidades y experiencias de cada uno de los miembros de la familia. Deberá considerar los puntos débiles y fuertes de cada miembro. Esto se consigue a través de sesiones que implican discusiones y conversaciones detalladas.
Identificar los problemas: Después de entender la situación familiar, el psicólogo intentará identificar los factores que causan los problemas.
Buscar soluciones: El terapeuta tratará de ayudar a la familia a encontrar métodos que contribuyan a resolver los problemas. Esta parte suele implicar el establecimiento de objetivos que los miembros puedan alcanzar o que la familia pueda lograr conjuntamente.
El flujo general del asesoramiento familiar implica múltiples sesiones de terapia en función de los problemas a los que se enfrenta la familia. También incluye diferentes métodos utilizados en la terapia, y estos métodos dependen de la experiencia del terapeuta.
¿Qué métodos se emplean en el asesoramiento familiar?
Hay diferentes métodos que un terapeuta puede utilizar para lograr los objetivos de la terapia familiar. La psicoterapia es el principal método utilizado. Utiliza palabras y conversaciones para tratar los problemas emocionales y los trastornos mentales.
Muchos otros métodos se integran con la psicoterapia para abordar los problemas familiares. Entre ellos, se encuentran los siguientes:
- La terapia de relación y de pareja: La terapia familiar también puede estar más centrada en la propia pareja. Utiliza principalmente métodos utilizados en la terapia de relación y de pareja.
- Educación: También se utilizan varios métodos para educar a los pacientes. Estos pueden incluir la educación de la relación y la educación familiar.
- Genograma: Este método consiste en construir un árbol genealógico e identificar el impacto de estas relaciones en la persona.
- Terapia cognitivo-conductual: La terapia cognitivo-conductual, también conocida como TCC, es un método utilizado en la terapia familiar. Consiste en abordar diferentes problemas que pueden tener las familias. Este método se centra en la modificación del comportamiento.
- Coaching y otras formas de terapia: Esta forma de terapia familiar dependerá totalmente del terapeuta.
La asesoría familiar es una herramienta muy flexible que funciona a la hora de abordar y resolver una gran variedad de problemas relacionados con la familia. Esto es, por supuesto, en parte debido a los métodos involucrados y la forma de abordar potencialmente dichos problemas.
¿Qué problemas aborda la terapia familiar?
La terapia familiar es una forma flexible de tratar muchos problemas familiares. Entre los distintos problemas que se abordan con esta forma de terapia se encuentran los siguientes:
Enfermedad, pérdida, duelo y otros acontecimientos: Los acontecimientos que provocan emociones negativas suelen ser el objetivo de la terapia familiar.
Uso de sustancias, abuso y adicción: La adicción a sustancias en un miembro de la familia puede afectar a los demás miembros de manera significativa. La terapia familiar ayuda a los demás miembros de la familia a afrontar la situación.
Conflictos: Los conflictos dentro de la familia podrán ser tratados de forma saludable a través de esta terapia.
Problemas profesionales o académicos: Los problemas familiares llegan a impactar de manera significativa en la vida profesional o académica de una persona.
Infidelidad y divorcio: Entre las parejas casadas, la infidelidad y el divorcio tienen consecuencias para toda la familia. Este tipo de terapia ayuda a todos, especialmente a los hijos, a afrontarlos de forma saludable.
Otros: Es posible tratar otros temas como la custodia de los hijos, problemas personales, enfermedades mentales y otros similares.
Hay que tener en cuenta que un terapeuta no resolverá los problemas de la familia por ella. En cambio, ayudará en la identificación de los problemas y las soluciones. Una orientación adecuada puede permitir a la familia llegar a respuestas que sirvan a la hora de afrontar los problemas.
Quizás lo más importante es que una asesoría adecuada es capaz de acercar aún más a las familias entre sí.
Formas en que el asesoramiento familiar permite unir a padres e hijos
Todas las familias están expuestas a acontecimientos negativos en un momento dado de sus vidas. Estos acontecimientos suelen ser los que más afectan a los hijos de la familia. Una terapia familiar es una forma de abordar estos acontecimientos y puede incluso unir más a la familia.
Entre las formas en que permite unir más a la familia, tenemos las siguientes:
Permite abrir líneas de comunicación entre padres e hijos
No todas las familias se encuentran cómodas hablando entre sí a un nivel profundo y personal. Suele ser la raíz de muchos problemas, ya que la falta de comunicación adecuada suele provocar malentendidos. Es especialmente notable en los adolescentes que se niegan a hablar con los padres, aunque hay muchos otros casos.
La terapia familiar permite que padres e hijos sean más abiertos entre sí. Puede abrir líneas de comunicación entre los miembros de la familia.
También ayuda a que ambas partes se sientan más cómodas a la hora de hablar de los problemas que hay que afrontar.
Contribuye a abordar los problemas de forma conjunta
Muchos problemas se abordan mejor en familia.
Es uno de los objetivos del asesoramiento familiar. Abordar los problemas en familia sirve para aliviar la tensión y la carga de un solo miembro. Otra ventaja es que proporciona a la familia una experiencia compartida.
Ésta es una experiencia que podría ayudar a resolver otros problemas que se presenten en el futuro.
Facilita el desarrollo de la empatía
Los métodos de este tipo de terapia son capaces de ayudar a crear empatía entre cada uno de los miembros de la familia.
Así, son más conscientes de cómo se sienten el resto con un problema o situación en específico. De igual manera permite el que cada uno sea más abierto a la hora de mostrar emociones. Esta apertura viene acompañada de la certeza de que la familia hará todo lo posible para apoyar a cada uno de ellos.
Refuerza los valores de confianza y honestidad
La honestidad y la confianza son importantes en cualquier relación. Esto es especialmente cierto para las parejas casadas.
La terapia familiar permite a las parejas casadas resolver los problemas de confianza y honestidad que surjan. Cualquier problema de confianza y honestidad repercute directamente en los hijos.
Esta es una forma eficaz de abordar el impacto negativo de estos problemas en los niños. También puede ayudar a los miembros a lidiar con situaciones parecidas en el futuro.
Ofrece la posibilidad de manejar el estrés de forma saludable
El estrés es un hecho normal para cualquier familia.
Sin embargo, muchas personas eligen manejar el estrés de una manera poco saludable. Es problemático para todas las familias, más aún para las que tienen niños pequeños que pueden imitar esos actos poco saludables.
La terapia familiar sirve de apoyo a cada miembro de la familia para encontrar formas sanas de afrontar el estrés.
Aporta a las familias el desarrollo conjunto de habilidades útiles
La terapia familiar contribuye a que cada uno de los miembros de la familia desarrolle habilidades que conduzcan a su mejora. También dota a cada integrante con habilidades que a futuro mejoraran la relación entre ellos. Estas son, entre otras, las siguientes:
- Resiliencia ante los problemas.
- Afrontar los acontecimientos negativos.
- Empatía, conciencia y comprensión.
- Habilidades de comunicación adecuadas.
- Muchas otras.
Todas estas habilidades favorecen el fortalecimiento de la familia en su conjunto y acercan a sus miembros entre sí.
Promueve el perdón, la resolución y la positividad
Aproxima a padres e hijos mediante el fomento de determinadas acciones. Más concretamente, la terapia familiar promueve el perdón, la resolución y la positividad.
Ayuda a los miembros de la familia a comprender mejor a otras personas y también fomenta la positividad.
Todo esto es posible gracias a la orientación de un terapeuta capacitado. Hay que tener en cuenta, por supuesto, que la familia también tiene que estar dispuesta a lograr un cambio positivo.
Se necesita el esfuerzo de todos los implicados para identificar, abordar y resolver los problemas. Hacerlo supondrá muchos beneficios para la familia, incluyendo el fortalecimiento de los vínculos familiares.
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