Puntos claves
- Un nuevo estudio ha descubierto que reducir el uso del teléfono inteligente en tan sólo una hora al día durante una semana es capaz de mejorar nuestra salud mental.
- Controlar el uso de los teléfonos inteligentes y el impacto que tienen en la salud mental ayuda a realizar cambios positivos.
- Dejar de utilizar el teléfono inteligente por completo no es tan beneficioso para la salud mental.
- Más de 6.000 millones de personas en todo el mundo utilizan teléfonos inteligentes, y es esperado que esa cifra aumente cada año.
Utilizamos nuestros teléfonos móviles literalmente para todo, desde simples llamadas telefónicas y mensajes de texto hasta para hacer reservas o para obtener direcciones.
Pasamos una media de cinco a seis horas al día con nuestros teléfonos inteligentes, sin incluir el uso relacionado con el trabajo. Si bien resultan útiles, el uso excesivo del teléfono móvil con frecuencia tiene un impacto perjudicial en nuestra salud mental. Está relacionado con el deterioro de la función cognitiva, la impulsividad, los problemas de sueño y la adicción a las redes sociales en los adolescentes.
No te olvides del teléfono, pero limita el uso
Pero a pesar de estos peligros, un nuevo estudio, publicado en Journal of Experimental Psychology, ha descubierto que basta con un pequeño ajuste en el uso de los teléfonos inteligentes para que nuestra salud mental cambie notablemente.
“De acuerdo con el estudio, los cambios conscientes y controlados del tiempo diario dedicado al uso de los teléfonos inteligentes pueden contribuir al bienestar subjetivo: menos síntomas depresivos y de ansiedad, menos tendencias de uso problemático, más satisfacción vital”.
– Dra. Yalda Safai
Estar todo el día enganchado a las pantallas, por pequeñas que sean, no es saludable. Pero si reducimos el uso del teléfono móvil y somos conscientes de las formas en que lo utilizamos, podemos tomar medidas que mejoren nuestra salud mental.
El estudio
Para este estudio, los investigadores alemanes recopilaron datos desde abril de 2019 hasta noviembre de 2020, de participantes mayores de 18 años.
- Más de 600 individuos fueron seleccionados al azar y divididos en tres grupos.
- Un grupo no utilizó el teléfono móvil en absoluto durante una semana.
- Un segundo grupo limitó el tiempo de uso del teléfono móvil, reduciendo el uso en una hora diaria.
- El último grupo siguió utilizando el teléfono móvil sin cambiar el comportamiento.
Los participantes respondieron a preguntas sobre el estilo de vida al cabo de un mes, y de nuevo transcurridos cuatro meses. El objetivo era ver si los cambios en el uso de los teléfonos móviles provocan cambios en el comportamiento o la salud mental de los participantes. Los investigadores hicieron preguntas sobre la actividad física, el consumo de cigarrillos y los signos de depresión o ansiedad.
Los resultados mostraron que las personas no necesitan dejar de usar el teléfono móvil por completo para tener una mejor salud mental; pero limitar el uso sí ayuda.
“Los resultados de este estudio indican que una reducción en el uso del teléfono móvil de una hora al día durante una semana da lugar a una reducción del su uso a largo plazo, así como a una reducción de la depresión y la ansiedad, y a una mejora de la actividad física y de la satisfacción vital”, explica Jennifer Katzenstein, PhD, ABPP-CN, directora de Psicología, Neuropsicología y Trabajo Social, Codirectora del Centro de Salud Conductual del Hospital Infantil John Hopkins.
Saber que un poco menos de tiempo en las pequeñas pantallas es capaz de marcar una diferencia significativa en tu salud mental es útil, pero saber cómo implementar esa reducción es la clave.
Cómo hacer que tu teléfono móvil trabaje para ti
La necesidad de usar el teléfono móvil varía de una persona a otra. Pero ejercer el autocontrol es una medida que todos podemos tomar para mejorar nuestra salud mental.
“Supervisar nuestro uso y ser conscientes al respecto tiene un impacto significativo”, afirma la Dra. Katzenstein. “Llevar una ‘dieta de redes sociales’ o una ‘dieta de teléfonos moviles’ para reducir el uso general de estos, así dure poco tiempo”.
Los expertos también recomiendan ser conscientes de cómo te sientes cuando utilizas el teléfono inteligente. Recorta el uso de tu teléfono inteligente si te sientes estresado, apresurado o ansioso.
Si te preocupa echar de menos tu dispositivo en la mano, o tu dosis de redes sociales de cada hora, puedes sustituir la navegación por el móvil por otras actividades: leer, hacer ejercicio, pasar tiempo con la familia y amigos, y otras actividades que te gusten, te ayudarán a reducir la necesidad de consultar las aplicaciones del teléfono.
Cuando no tienes la nariz metida en el teléfono, puedes notar más la belleza y la alegría del mundo que te rodea. No estar absorbido por las noticias y las redes sociales es justo el cambio que necesitas para mejorar tu salud mental.
“Un pequeño cambio en nuestro comportamiento puede tener un gran impacto en nuestra salud mental general y en lo positivo que sentimos sobre nuestras vidas, así como en los comportamientos de salud que realizamos”.
concluye la Dra. Katzenstein.
El uso excesivo del teléfono móvil puede causar estragos en tu salud mental. En la mayoría de los casos, dejar de utilizar el teléfono móvil no es una opción realista.
La buena noticia es que, según este estudio, no es necesario dejar de usar el teléfono. Pequeños cambios en tus hábitos de uso suponen una gran diferencia en tu estado mental y emocional.
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