Índice
Puntos claves
Un nuevo estudio analizó el impacto de que los empleados deban estar conectados fuera del horario de trabajo.
Las personas que respondieron a este estudio presentaron una mayor probabilidad de sufrir malestar psicológico, agotamiento emocional y dolencias físicas.
Esta investigación se hace eco de estudios anteriores que han demostrado el impacto negativo de trabajar demasiado.
En el último año y medio, los límites del lugar de trabajo se han tirado por la ventana, y la prioridad principal de todos es simplemente sobrevivir.
Aunque el trabajo desde casa ha mezclado aún más la vida personal y las tareas, esto no es ni mucho menos un problema exclusivo de la pandemia.
Los empleados, tanto en casa como en las oficinas, experimentan la necesidad de seguir conectados después de las horas de trabajo.
El impacto de esta cultura de conexión constante es perjudicial.
La más reciente prueba de ello proviene de una nueva encuesta de The Conversation que analizó el impacto en la salud física y mental de la comunicación digital fuera del horario de trabajo.
La investigación
De los más de 2.200 participantes, el 21% declaró que sus supervisores esperaban que respondieran a cualquier llamada, correo electrónico o mensaje de texto fuera del horario laboral. En comparación con las personas de las que no se esperaba que respondieran, las de este grupo eran más propensas a:
- Sentir malestar psicológico, del 70,4% al 45,2%.
- Presentar agotamiento emocional, del 63,5% al 35,2%.
- Mostrar dolencias físicas, como el dolor de espalda y los dolores de cabeza, del 22,1% al 11,5%.
A su vez, cuando se les pidió que calificaran el ambiente de seguridad psicosocial (cuánto protegía su salud psicológica) del lugar de trabajo, el 62% lo calificó de “pobre”.
“Cuando está previsto que los empleados permanezcan conectados más allá del horario de trabajo, permanecen en un estado constante de estrés”.
– Lindley Cherry, MS
“Si no se les permite volver a un estado de relajación, los empleados pueden experimentar una angustia significativa que conduce a dolores de cabeza por tensión, dolor de espalda y de hombros, problemas de memoria, insomnio, fatiga crónica, depresión y más.” afirma Lindley Cherry, MS, consejera clínica de salud mental y consultora de C&C Betterworks.
Estar conectado digitalmente al trabajo
Las expectativas de los compañeros de trabajo generaron cantidades de angustia casi idénticas a las de los supervisores. Estos resultados pueden atribuirse en parte al 30% de los participantes que afirmaron estar comunicados digitalmente con otros compañeros de trabajo los fines de semana y esperar una respuesta en el mismo día. Otro 55% de las personas enviaron correos electrónicos relacionados con el trabajo a sus colegas por la noche.
Una cultura de trabajo que perpetúa la conexión después de las horas de trabajo crea un ciclo negativo.
“Se espera que una persona esté conectada después de las horas de trabajo y esto provoca que otras personas también trabajen muchas horas, y si no lo hacen, temen que se les considere que no trabajan tanto como el resto”, dice Desreen Dudley, PsyD, psicóloga clínica licenciada de Teladoc.
“Este sentimiento de inadecuación al ser comparado con los compañeros de trabajo es más propenso a surgir con el trabajo a distancia, dado que no se ve a los otros abandonar físicamente la oficina para terminar la jornada laboral”.
– Desreen Dudley, PsyD
Investigaciones anteriores
La encuesta de The Conversation se centró en empleados de universidades de Australia, pero este patrón coincide repetidamente con investigaciones anteriores. En un estudio de 2016, los investigadores descubrieron que la sola expectativa de tener que responder a los correos electrónicos después de las horas de trabajo es capaz de provocar agotamiento y un menor equilibrio entre el trabajo y la familia.
Un estudio de mayo de 2021 descubrió que las personas que trabajan más de 55 horas a la semana tienen un 35% más de probabilidades de sufrir un accidente cerebrovascular o ACV y un 17% más de probabilidades de morir de cardiopatía isquémica que las que trabajan entre 35 y 40 horas a la semana.
El estrés es un factor de riesgo tanto para los ACV como para las cardiopatías.
Debido a la pandemia, el trabajo a distancia está muy expandido y, como mencionó Dudley, esto podría causar problemas como; asumir que tus colegas están trabajando más tiempo del que en realidad trabajan, y como consecuencia de ello, te ves en el compromiso de permanecer más horas conectadas al trabajo.
“Vivir y trabajar en el mismo lugar también lleva a una gestión ineficaz del tiempo, ya que la estructura desaparece, lo que hace que te sientas más estresado para completar todo y que trabajes más tiempo.”
– Desreen Dudley, PsyD
Tiempo personal
También es capaz de reducir los límites entre el trabajo y la vida personal y limitar el tiempo que tienes para recargarte y disfrutar fuera del trabajo, añade Dudley. Perder este tiempo para ti y tus seres queridos puede ser perjudicial.
“Es posible que para mantener el ritmo debas comprometer tu tiempo de ejercicio regular, tus comidas o tu tiempo de descanso, lo que afectará a tu bienestar a largo plazo.”
– Dra Rashmi Parmar
La doctora Rashmi Parmar, psiquiatra de niños, adolescentes y adultos de Community Psychiatry, la mayor organización de salud mental para pacientes externos de California, explica que esta situación es especialmente difícil para las personas que trabajan en casas pequeñas o abarrotadas, pero que incluso las personas que se desplazan al trabajo pueden tener dificultades para crear un equilibrio.
Consejos para separar el trabajo de la vida personal
Tanto si trabajas en casa de forma indefinida, como si vuelves pronto a la oficina o ya te desplazas al trabajo, nunca es tarde para empezar a crear límites entre el trabajo y tu vida personal. He aquí una serie de consejos aprobados por expertos para formar esa barrera en el futuro.
Acércate a tu jefe con una solución
Sería estupendo que tu jefe pudiera leerte la mente y saber exactamente lo que necesitas para ser más feliz y productivo en tu trabajo. Desgraciadamente, eso está lejos de ser así. Dudley recomienda abordar a tu jefe con lo que necesitas, con límites y todo.
Añade que, iniciar la conversación con los aspectos negativos, como que te sientes abrumado, infeliz y quemado, a veces hace que parezca que te quejas y que no estás interesado en buscar una solución.
“Si tu feje no te permite volver a un estado de relajación, puedes experimentar una gran angustia que te llevara a padecer dolores de cabeza por tensión, dolores de espalda y de hombros, problemas de memoria, insomnio, fatiga crónica, depresión, entre otros.”
– Lindley Cherry, MS, LCMHC
Tómate el tiempo necesario para encontrar varias soluciones y prepárate para negociar, trabaja con tu jefe para acordar una serie de expectativas que te sirvan.
Por ejemplo, puedes comunicar que si hay una verdadera emergencia, se te podrá localizar en tu número de teléfono. Pero que no revisarás los correos electrónicos hasta la mañana, añade Stephanie Harrison, fundadora y directora general de The New Happy.
Ocupa un espacio de trabajo designado
No pasa nada si llevas más de 15 meses trabajando en casa y todavía no tienes un espacio de trabajo designado.
Esta dinámica se ha sentido continuamente temporal, y crear un lugar específico para trabajar ha podido ser desalentador.
Aunque se trate de un pequeño rincón o de una silla concreta en la que siempre te sientas, intenta elegir un lugar al que puedas ir constantemente para trabajar, pero que también puedas evitar durante otras horas.
Hacer esto crea una pequeña sensación de separación, explica Harrison.
Utiliza una transición para empezar y terminar el trabajo
“Si los lugares de trabajo y de casa ya no están separados físicamente, crear una nueva rutina de ir y venir del trabajo es esencial para mantener un equilibrio saludable entre el trabajo y la vida.”
– Lindley Cherry, MS, LCMHC
Sugiere escuchar canciones específicas sólo al empezar y terminar el trabajo. Este hábito te ayudará a reconocer que es el momento de cambiar de un espacio mental a otro. Si la música no es lo tuyo, prueba con otra actividad que te guste, como hacer ejercicio o escuchar un audiolibro o podcast corto.
Mantén una rutina
Nadie entiende tu rendimiento laboral tan bien como tú. Piensa en los momentos en los que eres más y menos productivo, e intenta programar tu día en torno a ellos.
Si te apoyas en lo que te funciona, es menos probable que sientas la necesidad de sumergirte en tareas adicionales después de las horas. Asimismo, te dará tiempo para hacer cosas que te gustan a lo largo del día.
“Es importante reservar suficiente tiempo para las comidas, el ejercicio, la relajación y el sueño para que estas áreas de tu vida no se vean comprometidas.”
– Dra Rashmi Parmar
Crea barreras reales que impidan trabajar fuera de horario
Puedes decirte a ti mismo 100 veces que ignores un correo electrónico, pero en el momento en que aparece en tu pantalla, es difícil resistirte a mirar. Teniendo esto en cuenta, intenta eliminar la tentación siempre que sea posible.
“Nuestros teléfonos son extremadamente tentadores, y a veces resulta útil tomar medidas como eliminar el correo electrónico de nuestros teléfonos, mantener el teléfono en otra habitación o desactivar las notificaciones”, finaliza Harrison.
Qué significa esto para ti
A casi todos se nos puede ocurrir una razón para estar conectados después de las horas de trabajo.
Es posible que ciertas personas actúen en favor de la buena voluntad de su jefe para un ascenso anticipado en el trabajo. Mientras que otros pueden estar luchando contra la “norma” establecida por otros compañeros que se niegan a estar separados del trabajo.
Sea cual sea el motivo, la presión por estar conectado irá pasando factura a tu bienestar mental y físico.
Recuerda que lo primero es cuidarte a ti mismo.
Terapia Online – Puedes lograrlo
Con la psicoterapia online, gracias a los avances de las tecnologías, nos podemos permitir llevar a cabo un mejor tratamiento del estrés, gracias a que nos permite evitar cargas añadidas, como pueden ser los desplazamientos al despacho, imprescindibles en el caso de la terapia presencial. Esto como un ejemplo más.
Porque gracias a la Psicoterapia online, nos podemos permitir estar más accesibles al paciente incluso en esas situaciones puntuales que le generan estrés.
Además, nosotros aplicamos la tecnología para la realización de las sesiones por videollamada y en ello, las técnicas de relajación, que suelen ser unas de las medidas más prácticas en el tratamiento del estrés, ya que permiten transformar el distrés en eustrés, se pueden impartir fácilmente a través de una pantalla.
Si sufres problemas de estrés, quizás haya llegado el momento de ponerle solución, gracias a las facilidades que desde Psicología Online Avanzada te ofrecemos.
Te esperamos.
