Jota: Muy buenos días a todos. Un día más aquí para hablar de salud mental y de nuevo estamos con nuestra querida amiga Paula Masa, que como todos sabéis, es psicóloga experta en terapia online, con más de 20 años haciendo terapia, más de siete años haciéndolo de forma online y además es supervisora de casos y apoyo del equipo de Psicología Online Avanzada. Muy, muy buenos días Paula, ¿qué tal? ¿Cómo estás?
Paula: Buenos días, Jota. Encantada de estar aquí contigo.
¿Qué son las relaciones abiertas?
Jota: Genial, porque hoy traemos otro tema muy interesante. Tenemos, siempre se escuchan muchos los capítulos que tratan sobre la pareja y las relaciones, que creo que es un tema que interesa bastante. Y hoy vamos a hablar de relaciones abiertas y poliamor, que yo creo que lo mejor es que empecemos por saber qué es esto, si nos puedes definir de alguna manera qué son las relaciones abiertas y el poliamor.
Paula: Yo creo que definimos las relaciones abiertas de una forma muy general, diciendo que son las relaciones no monógamas. Relaciones abiertas son esas relaciones consensuadas en las cuales los miembros de la pareja negocian la libertad de exploración de otras relaciones románticas o sexuales con otras personas. Así lo podríamos definir a un nivel muy general. Luego hay diferencias entre unos términos y otros.
Jota: Vale. ¿Y esto es una actividad que se realiza ahora en la actualidad y no se hacía antes o se ha hecho siempre o es algo más actual?
Paula: Bueno, yo creo que es algo más apropiado, o más adaptado a nuestros tiempos. Porque por una cuestión evolutiva, siempre se ha dicho que el ser humano, como animales que somos, somos una especie monógama. Realmente quizás no haya sido del todo así, como desde el punto de vista más biológico vaya, sino desde el punto de vista más evolutivo, sí se ha entendido que las relaciones monógamas eran las que más se iban a adaptar a nuestro entorno y, por tanto, proporcionarnos la supervivencia. A día de hoy, tal y como ha cambiado nuestro ambiente, ha cambiado nuestra sociedad, cambia nuestra cultura, podemos decir que no solamente es el único formato de relación que nos puede garantizar la supervivencia, sino que existen otros. Y es a esto a lo que nos abrimos, por tanto, a la diversidad.
¿Qué es el poliamor?
Jota: Claro. Esta es la definición que has hecho de relaciones abiertas, entiendo. ¿Qué diferencia hay con el poliamor?
Paula: Bueno, yo creo que dentro de las relaciones abiertas, o mejor dicho, relaciones no monógamas, están las relaciones abiertas y está el poliamor. Las relaciones abiertas, en principio, se define a aquellas donde existe una pareja principal y a partir de ahí, obtenemos la libertad para poder explorar otro tipo de relaciones, pero de una forma más esporádica, como si existiera una cierta jerarquía, vaya. En el poliamor hay como más equilibrio, o digamos, estamos más todos como al mismo nivel. Tenemos distintas relaciones al mismo tiempo, o incluso podemos tener una relación que se componga de varias personas. Esa es un poco la diferencia. Aunque yo creo que como son términos nuevos y formatos nuevos de relación, puede haber ciertos matices que hagan generar otras diferencias.
Estrategias para Fortalecer Relaciones no Monógamas
Jota: Claro. Lo que más puede llamar la atención a la gente que no está en este tipo de relaciones, en los que están en una relación monógama, ver desde fuera este tipo de relación, entiendo que lo que llama la atención es el tema de los celos, la posesión, cómo se lleva ese tipo de cosas. ¿Cómo se establece este tipo de..? Para llevarlo bien, para no estar sufriendo en una relación de este tipo, ¿cómo se llevan los celos? No sé, un poco esa parte de posesión que se tienen en las relaciones de ‘mi’ pareja, todo este tipo de cosas que suceden. ¿Cómo se llevan a cabo en estas relaciones?
Paula: A mí me parece que se trata de hacer un trabajo muy interesante, un trabajo muy personal, muy individual, muy autónomo, como si dijéramos. Ya no tanto de pareja, sino un trabajo para contigo mismo, en el cual, obviamente, es necesario el autoconocimiento, la gestión y regulación emocional y para muchos es prácticamente un reto. Tengamos en cuenta que nuestro cerebro en sí, de por sí es celoso, es posesivo, se siente poseedor, tiene esa tendencia. Nuestro cerebro más básico tiene esa tendencia a querer poseer aquello que tiene cerca y que le gusta. Entonces, es bastante fácil que surja de una forma rápida, inmediata y a un nivel muy emocional, una sensación de perder a mi pareja, de perder a la otra persona, cuando en realidad quizás precisamente lo que estoy haciendo con esa gestión, esa regulación emocional, ese autoconocimiento y ese reto que me planteo de trabajar mis celos y mis inseguridades, es asegurar y dar una firmeza y afianzar mi relación de pareja, mucho más.
Más Allá de la Exclusividad: Explorando los Celos en Diferentes Tipos de Relaciones
Jota: Me hace pensar esto ¿Por qué no pasa en otro tipo de relaciones? Me refiero a las amistades. Si yo puedo tener varios amigos y que mis amigos queden tranquilamente sin mí y que hagan cosas sin mí, ¿por qué no pasa con la pareja? O sí que ocurre, a lo mejor hay personas que ven la relación sentimental como una relación de amistad y no importa que unas personas con las que yo también tengo relación sentimental, estén sin mí y no me afecte. ¿Cómo se vive esta diferencia con la amistad?
Paula: Para muchas personas que se plantean relaciones no monógamas, este es el planteamiento que se hacen. Si podemos tener distintas relaciones de amistad, combinar, compaginar, compartir, no estar en determinados momentos sin miedo a perder esas relaciones, ¿porque no va a poder ser en mi relación de pareja? Ese puede ser uno de los objetivos y motivaciones que lleva a alguien a plantearse una relación no monógama, por ejemplo. Pero tengamos en cuenta que esta tendencia de nuestro cerebro posesivo y, por tanto, la generación de los celos también se produce en relaciones de amistad. O sea que, bueno, pues tanto como podemos plantear la relación de pareja de forma más abierta, como planteamos las relaciones de amistad, a veces en las relaciones de amistad también a veces, casi, casi como que pedimos o exigimos una exclusividad. Tenemos que tener en cuenta que, bueno, a nivel cultural, a nivel social, es algo que tenemos más asumido y es algo que se entiende de una manera mucho más fácil, que las relaciones de amistad sean abiertas. Bueno, pues el que se plantea una relación no monógama, en ocasiones esta es su motivación.
Diálogo Abierto: La Importancia de la Comunicación en Relaciones no Monógamas
Jota: Entiendo que cuando esta situación, estas relaciones en las que están participando varias personas, al menos más de dos, no será tan fácil llegar a un acuerdo común de lo que se quiere y lo que no se quiere. Y debería haber un consenso, ¿no? En qué situación… ¿Cómo se establece este consenso, las reglas del juego se hablan, no se habla, surge solo o hace falta mucho diálogo? ¿Cómo se debería hacer correctamente?
Paula: Solo no puede surgir. Es necesaria muchísima, muchísima comunicación. Por eso es tan importante el desarrollar una confianza y desarrollar una intimidad con cada uno de los miembros de la pareja, de la triada o del tetra-amor en el que nos encontremos. Es necesario, importantísima la comunicación. Si ya lo es en cualquier relación, en esto de las relaciones abiertas, mucho más. Es muy importante tener esa comunicación directa, esa comunicación explícita. El respetar mucho la individualidad de cada uno al mismo tiempo. Asumir compromisos muy importantes y asumir, por tanto, una responsabilidad afectiva. Es esencial en este tipo de relaciones, aunque también hay un formato de relaciones abiertas que habla de todo lo contrario, de no tener que normalizar, de no tener que poner normas, a eso me refiero, regularizar y estar estableciendo esos límites, sino aceptar la autonomía y consensuar o negociar en cada momento. Requeriría todavía muchísima más comunicación. Al final, creo que es un ejercicio muy interesante de confianza y por tanto, bueno, pues creo que puede aportar mucho, ya no solo para las relaciones, sino para otros muchísimos aspectos de nuestra vida, el tener tan desarrollada esa comunicación, esa confianza, ese autoconocimiento, por tanto, porque para tener una comunicación sincera hemos de conocernos muy bien, una buena regulación y gestión emocional. O sea, hay que hacer un trabajo muy, muy completo a nivel psicológico.
La Honestidad como Pilar: Abordando los Desafíos Emocionales en Relaciones no Monógamas
Jota: Me imagino que en muchas ocasiones ocurrirá que aunque haya este diálogo y se establezcan ciertas normas, habrá gente o parte del grupo, o a lo mejor todos, sufriendo, teniendo celos, que se los podrán estar callando o no, más o menos, por no salirse de esa norma que se ha establecido, pero teniendo su pequeño sufrimiento interno, de: ‘No me hace tanta gracia que ocurran estas cosas, pero es lo que hemos establecido.’ ¿Sucede esto? O cuando ya estableces estas normas y estas reglas, la gente que está dentro de esta relación, a través del diálogo, no sufre estas consecuencias.
Paula: Dices que automáticamente se tengan que sentir tranquilas, que no encuentren ningún obstáculo, que no encuentren ninguna dificultad. No, yo creo que en muchos casos pueden darse esas dificultades, esos obstáculos, por supuesto, o sea, no porque lo dialoguemos, no porque lo hablemos, no porque estemos desarrollando esa confianza, entendamos que son procesos, no va a aparecer esa tranquilidad y esa seguridad de inmediato. Pero tampoco hay que callárselo, Jota. Si nos lo callamos, si nos lo guardamos, nos lo reprimimos, al final lo que ocurrirá es que explotemos y realmente estemos en esa relación de una forma que no es honesta, con lo que, por tanto, no estamos aportando esa parte tan importante que hace falta para tener una confianza. La confianza es esencial en cualquier relación, sea monógama, no lo sea. Entonces, si ya de por sí me estoy callando algo, estoy engañando, estoy obviando, estoy ocultando, digamos, mejor. El caso es que sé que tengo que hacerme un trabajo personal, quizás, si hemos determinado, hemos consensuado los límites, hemos establecido unas normas, yo sé que me tengo que hacer mi trabajo personal y me puede suponer un esfuerzo. Por eso te decía que es un trabajo muy interesante a nivel psicológico, porque requiere de una gestión emocional, de esa regulación emocional con un previo autoconocimiento y luego desarrollar mucho la responsabilidad afectiva. También es responsable decir: ‘Oye, aquí estoy sufriendo’, pero no te lo digo para que tú lo cambies, sino para hacerte partícipe del proceso en el que yo me encuentro, cuando me lo estoy trabajando, cuando lo estoy gestionando, cuando lo estoy regulando.
Jota: Aquí hay una cosa que en las relaciones monógamas ya sucede, que hay conflictos, separaciones, hay rupturas, discusiones. Cuando no son dos personas sino que participan más personas en esta relación, ocurrirá más, será más fácil, al ser más personas, que haya gente que quiera cambiar alguna regla, que quiera cambiar alguna norma, que discuta con uno y con otro, que hagan el vacío dentro de ese grupo a una de las personas o que puedan querer incorporar a más gente en la relación. O sea, pueden suceder muchísimas cosas, entiendo, en estas relaciones, en las que se participa y hay unas reglas más abiertas que pueden hacer que estas relaciones sean menos consistentes y que duren menos o se rompan o se modifiquen con más frecuencia que una relación monógama.
Paula: Sí claro, aquí hay que apelar a las diferencias individuales. Todos somos distintos. Y si es fácil que se produzca, por ejemplo, choques entre dos personas a la hora de la convivencia, pues entre tres, entre cuatro, obviamente se pueden producir muchos más. Pero por eso insisto, es tan interesante y tan importante la herramienta de la comunicación. Lo de hacer vacíos no es una estrategia correcta. Aunque en un momento dado mi enfado personal en una relación monógama, por ejemplo, me pueda llevar a silenciarme, a callarme, a presentarme un tanto ausente. Puede ser una manera de gestionar mi enfado en ese momento, pero lo más inmediatamente posible, lo antes posible, al final, bueno, lo antes posible, en el tiempo en el que yo vea oportuno, debo de ponerlo sobre la mesa y comunicárselo a mi pareja. Pues esto pasaría si estamos en una relación de más personas. Lo del hacer vacíos ya suena un poco estratega, ¿no? O sea, pueda ser que yo me haya enfadado, pueda ser que tú te hayas enfadado, pero que nos unamos en nuestro enfado para hacer el boicot al otro, ya suena un poquito retorcido. Es estratega, evidentemente no es un recurso sano y oportuno para la relación. Y si eso está sucediendo y somos incapaces de poderlo cambiar, mejor sería que la relación se rompa.
Relaciones No Monógamas y el Entorno: Navegando las Normas Sociales y Familiares
Jota: Claro. Luego hay otra parte que es la vida fuera de la relación. Tenemos familia, tenemos amigos. ¿Cómo se debe vivir esto con nuestro entorno? ¿Se debe vivir de una forma natural? En Navidades llevas a tu trío a cenar con tu familia? ¿Cómo son estas relaciones fuera de nuestro día a día, ya con nuestro entorno?
Paula: No nos olvidemos que desde el momento en el que se plantean las relaciones no monógamas estamos rompiendo con ciertas normas y nos estamos planteando que unas normas que están como aparentemente muy establecidas pueden cambiar y que también son válidas. Evidentemente, necesitamos normas, a lo mejor para funcionar en este tipo de relaciones y como estamos diciendo todo el tiempo, es necesario que sean muy habladas, que sean muy comunicadas, que estén muy explícitamente determinadas. Entonces, precisamente por eso, a lo mejor también hay que romper con la norma de que en Navidades hay que llevarse a la pareja o a quien quiera que estés a tu ámbito familiar, por ejemplo. Es decir, si va a suponer un conflicto, hay que entender que aquello que es nuevo, aquello que es novedoso, para la sociedad en general le es más difícil de aceptar. No significa que no lo vayan a tolerar nunca, significa que necesitamos un tiempo y unos procesos para adaptarnos a los cambios. Entonces, claro, por eso de las diferencias individuales a unos les cuesta más, a unos les cuesta menos. Pueda ser que a mis padres les cueste entender que yo tengo una relación abierta y, por lo tanto, yo tampoco les tengo que exigir a mis padres que vengan los miembros de mi pareja, por ejemplo, a cenar en Navidad. Si por lo que sea, ellos no están conformes, a lo mejor ni siquiera tengo por qué ir yo a cenar en Navidad y no significa que me haya enfadado. Pero bueno, que se trata un poco de replantearnos ciertas normas y trabajarlas con mucha conciencia y al final darles una racionalidad. ¿Esto que estoy haciendo, por qué lo hago? ¿Por qué está socialmente establecido o por qué quiero hacerlo? ¿Para qué lo hago, mejor dicho?
Los Retos de las Relaciones No Monógamas: Más Allá de los Celos y la Posesión
Jota: Lo importante, al final, independientemente de las relaciones que tengamos, es que nosotros estemos satisfechos con la vida que tenemos, que no sea un problema y que lo vivamos con libertad y sin hacer daño a nadie. Y quizá este es el problema que es más difícil de ver para la gente que practica la monogamia, y es el daño. Es el de compartir a mi pareja con otra persona, que tienes que tener lo que comentabas antes, una mente muy abierta de saber, entender que no está haciendo nada malo, que es una norma compartida y que es una cosa aceptada por todos. Y en ese sentido, pues no debería existir ni el celo ni ese daño interno nuestro. ¿Crees que es este el reto más importante de una relación abierta, el tema de los celos? ¿O hay más problemas que pueden estar ahí para llevar adelante estas relaciones?
Paula: Yo creo que hay otros problemas. No es el único. El tema de la posesión, el tema de los celos. Hay otros problemas u otros temas, otros retos a tratar, mejor dicho. Algunos comunes con las relaciones monógamas, como por ejemplo el de la comunicación. La comunicación cuesta muchísimo en las relaciones en general. Entonces, ya no solamente es el tema de la posesión, el tema de los celos, es el tema de poder comunicarme bien con mi pareja y con los miembros de mi pareja, si somos varios. Y que estamos hablando de normas nuevas. Esto es por lo que es tan importante ser claros, ser directos, ser explícitos y ser honestos en todo momento, que estamos trabajando la confianza y son relaciones en las que entran muchos más estímulos con los que, por tanto, esa confianza es esencial. El reto no solamente el tema de la posesión o el tema de los celos. Y hablabas del sufrir o no sufrir. Tengamos en cuenta, Jota, que en realidad lo que nos hace sufrir es la infidelidad. Y qué es una infidelidad, no siempre hay que atribuirla al hecho de que mi pareja esté con otra persona al tema de la posesión, al tema de los celos, no solamente hay que atribuirla a eso. Una infidelidad es un incumplimiento de norma. Si hemos quedado en algo, si hemos consensuado algo y tú no cumples con ello, ya me estás siendo infiel. Con lo que, por tanto, es con eso, con lo que yo voy a sufrir. Por eso, vuelvo a insistir, es tan importante el poder establecer estos límites, establecer estas normas, el dialogarlo bien, el poderlo consensuar, el que estemos todos de acuerdo y aún así que nos planteemos nuestros propios retos personales, respetando mucho la individualidad de cada uno y asumiendo una grandísima responsabilidad afectiva. Creo que muchas personas optan por una relación no monógama, por el tema del compromiso. Y sin embargo, creo que en una relación no monógama, el compromiso quizás deba de ser mucho más fuerte.
Jota: Fíjate.
Paula: Así que no nos confundamos. Una relación abierta o una relación no monógama, no significa que no haya compromiso en ella.
Jota: Paula, a mí me has abierto un mundo. Me ha encantado hablar sobre este tema y saber cómo sobrellevar este tipo de relaciones y cómo hacerlo de manera sana para que sea del agrado de todos los miembros, no sólo el mío, sino de la gente con la que estoy compartiendo esta relación. Y espero verte muy, muy pronto en otro capítulo.
Paula: Yo también estaré encantada, Jota.
Jota: Hasta otro día.
Paula: Adiós.
Jota: Chao, chao.
