83 – Cómo terminar bien el año y pasar unas buenas Navidades

Jota: Muy buenos días a todos. Un día más aquí para hablar de salud mental y de nuevo estamos con nuestra querida amiga Ana, que como todos sabéis, es Psicóloga Sanitaria que trabaja con población adulta y adolescentes. Aplica el enfoque cognitivo conductual. Además, es una pieza fundamental del equipo de Psicología Online Avanzada. Muy buenos días, Ana. ¿Qué tal? ¿Cómo estás? 

Ana: Buenos días. Muy bien. Ya despidiendo el año y empieza uno nuevo, a ver qué retos hay ahí. Y muy bien, encantada de estar aquí un nuevo día más. 

Jota: Efectivamente, ya huele a Navidad. Estamos comiendo el turroncito ahí en casa, efectivamente. Y bueno, vamos a despedir este último capítulo del año. Vamos a hablar del balance de este año que hemos vivido y cómo enfrentar estos días que nos vienen por delante, que son normalmente diferentes a otros días del año. 

Ana: Sí, son días de ilusión para muchas familias, pero también pueden ser días de dificultad para otras. El enfrentarte con ciertos familiares que a lo mejor no te llevas bien y demás. Bueno, o bueno, que esas familias estén lejos, por ejemplo. Entonces, bueno, pues hay toda una serie de diferencias entre unas personas y otras y cómo afrontan estos días, que en principio son muy bonitos, pero bueno, hay realidades muy distintas también. 

¿Cómo impacta la temporada de fiestas a la salud mental? 

Jota: Claro, luego además suele ocurrir que como es una fiesta en donde la gente se reúne y tal. También se notan las ausencias y también puedes estar un poquito triste porque te das más cuenta que en otros momentos de esas personas que faltan. Pero bueno, vamos a ver cómo podemos afrontar a nivel de salud mental todos estos objetivos o retos que hay ahí alrededor de estos días. ¿Cómo impactan estas fiestas a la salud mental, así en general? 

Ana: Sí, pues bueno, estamos bombardeados de que la Navidad es un momento de felicidad, de alegría, no? Sobre todo en esas familias en las que hay niños, esa ilusión de los reyes magos y demás, que esa parte existe y es real. Pero al estar tan bombardeados de eso, como tenemos la necesidad de tengo que estar feliz. Debería de estar feliz, debería de estar contento estos días. Y bueno, no tiene por qué, es decir, si esa no es tu realidad, no pasa nada. Pero claro, es muy difícil enfrentarse a ello cuando todo el mundo está pensando en los regalos, qué hacer, está todo decorado, con luces y demás. Todos los mensajes que nos llegan es de tienes que estar feliz, tienes que estar pensando en estos regalos y a lo mejor, bueno, pues ese alguien al quien tú querías hacerle regalo, pues que ya no se encuentra en tu vida, o está lejos, o tú estás viviendo una situación personal en la que a lo mejor no te apetece tanto esa época del año. Entonces sí, impacta mucho, porque todos los mensajes que tenemos es de tienes que estar bien, tienes que estar feliz y bueno, no siempre es así la realidad. 

Navidad sin Estrés: Enfrentando las Dificultades con Autocuidado

Jota: Totalmente, efectivamente, es complicado. Además, hay ciertas situaciones que pueden generar un estrés asociado a todo esto, a la obligación de tener los regalos, a preparar una comida, que todo salga bien, encontrarte con gente que a veces te puede apetecer, a veces no. Todo ese estrés mezclado con el tengo que estar feliz, tengo que estar contento, ¿cómo se puede manejar esto? 

Ana: Pues me vienen varias dificultades que puedes estar atravesando una persona, por ejemplo, dificultades económicas en las que a lo mejor no te puedas permitir hacer ese regalo que tanto te gustaría. No sé, trastornos de la conducta alimentaria, por ejemplo, enfrentarte a esas comidas familiares en las que estás obligado a comer un montón y postre y demás y no estás preparado para eso, porque tienes ahí un problema muy grave. Yo lo que le recomendaría a esas personas es que traten de la mejor manera posible que puedan que su rutina se trastoque lo menos posible. Es decir, sí, asiste mientras tengas que hacerlo, pero si tienes que adaptarte a que tienes menos economía en ese momento, si a esa comida familiar no estás tan preparado, pues bueno, también te puedes retirar de esas situaciones o hacer lo mejor posible, lo mejor que sea para uno mismo. Es muy importante escucharnos, saber lo que necesitamos y aunque tengamos mensajes de: esto tiene que estar bien, a lo mejor no está bien y no pasa nada. Y que unas navidades pasen como si fuese otra época del año, que no son navidades, otra época normal, pues bueno, hay familias que a lo mejor esa celebración ese día no les viene bien. Entonces, es difícil comunicar sobre todo eso a las personas que tienes a tu alrededor, pero creo que es súper importante escucharnos en esos momentos y hacer lo que mejor nos venga. Y ya vendrán unas navidades mejores, ¿no? Si en estas a lo mejor no podemos disfrutarlas, no pasa nada. 

Navegando la Soledad en las Fiestas: Estrategias para Cuidar tu Salud Mental

Jota: Pues sí, efectivamente, hay que pensar en uno mismo antes de meternos en mayor problema. También comentábamos antes de pasada a la gente que pueda estar sola, no? Cómo se enfrenta a estos días en los que alrededor está viendo cómo todo el mundo se junta, se reúnen y otros están solos de manera muchas veces no buscada, porque vivas lejos de tu familia o por las circunstancias que sea, estés solo. ¿Cómo se puede llevar estos días diferentes? Porque aunque al final son días normales, no cambia nada. El sol sale igual, es todo lo mismo, pero el ambiente no es el mismo. Esta gente, ¿cómo puede llevar a nivel de salud mental el encontrarse solos? 

Ana: Pues mira, esto me lleva un poco, por ejemplo, a la pandemia, esto que estábamos enganchados a la televisión, a las noticias que salían y demás. Y esto muchas veces agobiaba a las personas, eso de tener todo el día la tele encendida, escuchar noticias, escuchar personas que caían enfermas, cada vez más números y demás. Tienes que hacer esto, la mascarilla así y asá. Des-bombardearnos de esa información, también a veces es nuestra elección. Entonces, quizá si estoy viendo, si estoy sola en casa y me estoy poniendo el programa de turno que te está recordando todo el rato que es Navidad y las uvas y no sé qué, pues a lo mejor no es la mejor opción. A lo mejor tengo que intentar que ese día sea lo más normal posible y yo también limitar ese bombardeo de información, a veces innecesaria y que no nos hace bien. Porque sí que es verdad que las Navidades también tienen ese punto de compra, compra, compra. Entonces, incluso los anuncios, absolutamente todo está relacionado a esa época del año. Entonces, bueno, pues esa información también nos la podemos limitar y elegir un poco a lo mejor, pues qué es lo que queremos ver o qué información queremos que nos llegue dentro de todo eso, porque al final esos recordatorios van a ser como mucho más fuertes en nuestra cabeza. Y lo que yo digo, pues intentar que ese día sea lo más normal posible, porque eso al final es un día más, donde sí es verdad que existen celebraciones, pero bueno, es un día más del año y si aparece la tristeza, no pasa nada, no hay que huir tampoco de las emociones negativas, es normal que aparezcan esas sensaciones y sobrevivir con ellas. Porque en muchos momentos de nuestra vida vamos a sentir tristeza o soledad o desamparo. Entonces, bueno pues a lo mejor ese día, pues sí, les puedo decir a esas personas sí, a lo mejor hay más tristeza que otros, es posible, pero también es normal la situación que está viviendo. Tiene que hacer algo que le agrade en ese momento. No sé, que se cuiden, que se cuiden mucho ese día. 

Consejos para Sobrevivir a las Reuniones Familiares: Evitando Conflictos Innecesarios

Jota: Sí, fíjate que estas personas que se encuentren a lo mejor más solas, están echando de menos a la compañía de seres queridos y a lo mejor otros que sí se están juntando, están teniendo esas reuniones y no se lo están pasando tan bien. Estas típicas reuniones que al final hay tantas discusiones con el cuñado, que si un conflicto, una conversación de este tema, del otro, que si el Barça, que si el no sé qué, que si no sé cuánto. Al final son cosas que a veces tampoco está tan mal huir de estas cosas. Que bueno, que lo importante es que nos juntemos y todo vaya bien. ¿Cómo en estas celebraciones en las que a veces saltan en estos tipos de conflictos, así se puede llevar bien y encima muchas veces van acompañadas de una copita de champán, si no sé qué, que estamos un poquito más ligeros y se nos escapan a lo mejor comentarios que en otros momentos no hubiéramos hecho. ¿Cómo se puede sobrellevar esas reuniones para no meter mucho la pata? 

Ana: Pues sí, bueno, yo intentaría en ese momento, pues esas personas o situaciones tratar de evitarlas un poco. No sentarte al lado de esa persona. Si te hace un comentario desagradable, pues evidentemente puedes poner límites, pero bueno, siempre intentando como mantener un poco la compostura de esos momentos. Y si hay algo que no quieras contestarle a un primo o cuñado o lo que sea sobre tu vida personal, pues también siéntete libre de no tener que hacerlo. O de no tener por qué contar la realidad. Porque sí que es verdad que muchas veces esas reuniones familiares es como: ‘y tienes pareja, y no sé qué y tal. Uy, has engordado. Uy, no sé qué.’ Y es como Ostras, tienes trabajo y has encontrado, por ejemplo, imagínate una persona que está pasando por una situación de paro y demás y ya se encuentra un trabajo y tal y demás. También puede poner límites y decir mira, que no me apetece hablar hoy de esto, que me apetece pasármelo bien. Y bueno, tratar de estar lo mejor posible y comprender sobre todo que es un tiempo muy, muy, muy, muy, muy limitado en tu vida, que son simplemente unas horas que vas a tener que pasar con tu familia y que después, pues bueno, si esas personas no las vuelves a ver en un tiempo, pues no pasa nada. Al final son simplemente unas horas que le damos mucha importancia. Pero bueno, es como el día que tienes que hacer algo que no te apetece o tienes que hacer gestiones o lo que sea, que simplemente son unas horas de tu día. Entonces, bueno, vamos a darle la importancia que tienen. Y si el día de noche buena, o el día de la noche vieja, no te lo estás pasando bien, no pasa nada. O sea, al final la vida son el resto de los días. No nos tenemos que focalizar solamente a eso. Es lo que comentábamos también en verano, ¿no? Que es como que estoy esperando todo el año a que lleguen esos momentos, ese momento de vacaciones, ¿no? Y es como jolín, es que el resto de días también podemos hacer muchas otras cosas, ¿no? Dentro de lo que nuestra responsabilidad nos permita. Entonces en Navidad lo mismo. Al final son unas horas de tu vida, ¿no? No tiene por qué tener una repercusión trascendental y si no te lo pasas bien, no pasa absolutamente nada. Te lo puedes pasar mejor otro fin de semana que te vayas con tus amigos por ahí, ¿no? Entonces, bueno, relativizar diría yo, relativizar esos momentos. 

Reflexionando sobre el Año: Un Consejo Práctico para Evaluar tu Vida

Jota: Sí, aquí también es importante, cuando llegan estas fechas, hacer un poco de balance. Y está acabando un año y se puede hacer en cualquier momento, pero son fechas más señaladas en las que está bien pensar un poco en todo lo que ha pasado en el año, lo bueno, lo malo, cómo has evolucionado profesional o personalmente. ¿Hay algún consejo que nos puedas dar para este tipo de cosas? 

Ana: Pues mira, un ejercicio que suelo hacer con pacientes en las primeras sesiones o pacientes que a lo mejor hemos trabajado y ya hemos llegado a objetivos, y a lo mejor es como un poco: no sé qué más podría trabajar. Lo que les suele hacer es que me digan cuáles son las áreas de su vida, cómo dividirían su vida en áreas, pues área familiar, social, por ejemplo, si te gusta mucho el deporte, pues deporte sería una de ellas. Ocio, intrapersonal, el cuidado propio, ¿vale? En qué áreas dividiría su vida. Y luego vamos a poner el tiempo que dedica cada una de ellas. Pues dedico tanto al trabajo, tanto a mi familia y demás, y el grado de satisfacción que tienen cada una de ellas. Esto nos muestra de una manera muy real y más si lo hacemos como en una especie de gráfico, como un circulito con sus triángulos y sus tartas y demás. Eso hace muy bien ver que a veces le estamos dedicando mucha más importancia o más tiempo a áreas que no son tan importantes en nuestra vida y que a lo mejor estamos dejando relegadas otras que sí que lo son. A veces a la familia o a los amigos los dejamos en última posición cuando verdaderamente es lo que más nos aporta. Y el grado de satisfacción, pues si, jolín, si estamos hablando de la pareja y te estoy diciendo que mi grado de satisfacción es un cuatro, pues quizá en este balance del año tenemos que ver por qué ese grado de satisfacción es así o en el área laboral, porque en el área laboral es un cinco, un 6, ¿por qué no es un 7, un 8, qué está pasando? ¿Se puede mejorar? Entonces, bueno, esto es algo que suelo hacer en momentos en los que en la terapia a lo mejor ya hemos conseguido otros objetivos y ver hacia dónde nos podemos dirigir. Vamos a ver estos aires de tu vida, cómo están. Y suele ayudar mucho, sobre todo cuando lo hacemos en un gráfico. Y las personas ven, Ostras, ¿por qué estoy dedicando a mi trabajo el 50 por ciento, o sea, la mitad de mi vida, cuando verdaderamente lo más importante para mí son mis hijos o es esto, no? Entonces, bueno, ese es el balance que yo suelo hacer en sesión y que cada persona quizá le puede servir. Yo voy a hacer el balance de mi vida ahora mismo como está y no solo a final de año, sino en cualquier momento en el que vea que hay un malestar para ver cómo están esas áreas, qué importancia le estoy dando y qué grado de satisfacción tengo en cada una de ellas también y qué puedo mejorar en mi vida social, por ejemplo. Me junto con personas que me aportan, esta amiga con la que veo que ya no hay relación, no sé qué hacer. Ahí nos hace ver un poco cuáles son nuestros conflictos y a ver qué podemos hacer en cada una de esas áreas, qué está en nuestras manos para mejorar. 

Jota: Qué interesante. Está muy bien que cada uno decida cuáles son las áreas de su vida, dependiendo de lo que haga. Como decías tú, si hay alguien que le gusta mucho el deporte, pues que incluya una parte de deporte y ver lo satisfecho que está y el tiempo que dedica. Me imagino que aquí sería interesante, a mí se me ocurría mientras estabas hablando, cómo me gustaría el año que viene que fuera esa tarta, ese pastel. 

Ana: También, sí. 

Jota: Y pensar, hacer primero el que has tenido este año y ahora decir, ¿cómo quiero que sea mi pastel el año que viene, mi tartita? Y dibujar tu tarta y empezar a trabajar en esa nueva tarta para el año que viene, para que el año que viene tu tarta sea con las cosas que más te molan y que tu satisfacción sea mejor en todas. 

Ana: Pues es una ideaza la verdad. O sea, sí, esto es trabajar la perspectiva, el futuro, cuál es tu proyecto de vida, hacia dónde te quieres dirigir? ¿Cuáles son tus objetivos? Me parece muy buena opción, no? Hacer la actual y oye, en unos meses donde quieres estar, en un año donde te gustaría estar, ¿cuál querrías que fuese tu tarta? Y a veces vemos muchas diferencias ahí, es cuando, vale, pues entonces sí que podemos trabajar en cosas. 

Diseñando tu Futuro: Cómo Construir tu ‘Tarta de Vida’ y Establecer Metas

Jota: Claro, pero es muy interesante tener la tarta de ahora, saber cómo tienes tu tarta ahora mismo y poder hacer la futura, tu tarta futura. Y el ejercicio ya es redondo si después de hacer tu tarta, de cada uno de esos pedacitos de cada área, te pones una tarea para hacer ya, para hacer esta semana, para empezar en cuanto puedas, para mejorar ese área, la que sea, el ocio, la familia, el deporte, en el trabajo. Qué cosita tienes que hacer la siguiente. Y ya si te la guardas y el año que viene la analizas, pues ya… 

Ana: Eso sería un súper trabajo. Sí, hay que… Es importante hacer introspección, ¿no? Parar, plantearnos, oye, ¿cómo está mi vida ahora? ¿Qué quiero conseguir? ¿Hacia dónde me dirijo? ¿Cuál es mi foco? ¿Le estoy dando importancia a las cosas que verdaderamente me importan? Le doy mucha importancia a esto cuando verdaderamente no es tan importante en mi vida o no tiene tanta trascendencia. Entonces, bueno, esto ayuda mucho a focalizar y al final algo que yo suelo decir siempre es que tu vida es ahora, o sea, no es antes, ni es después, tu vida es ahora. Es decir, ¿qué te está pasando ahora y por qué nos tenemos que plantear solo estas cosas al final de año? Es que en cualquier momento del año en que nos sintamos que hay algo que no funciona bien, tenemos que planteárnoslo, porque solemos postergar y postergar estas situaciones complicadas o esta resolución de problemas, que a veces cuesta enfrentarse a ellos, enfrentarse al miedo, a las dificultades. Pero esto hay que hacerlo en el momento en el que tú sientas malestar, pero en todo el año, no solamente ahora, que sí que es verdad que es un momento muy reflexivo y está muy bien fomentar esa reflexión de cara al nuevo año, pero cualquier otro momento del año, oye, esta reflexión se puede hacer, ¿no? El cómo estás ahora y a dónde te gustaría dirigirte. 

Jota: Sí, efectivamente, tienes toda la razón que en cuanto tengamos algo que que chirría, vamos a sentarnos y ver qué está pasando para ponerle remedio. Pero al menos, al menos si no lo hemos hecho, ahora que es un punto en el que da pie a ello, no dejemos de poner remedio en estos, en todo, al final, que son muchas áreas de las que estamos hablando y que llega un momento de cambio, cambiamos de cifra, de año, de todo y como que reseteamos al final estas cosas. Pero bueno, son un día más, efectivamente. 

Ana: Sí, sí, sí, sí. 

Jota: Pero nos lo tomamos siempre como una página nueva. Empezamos otro, otro momento y viene muy bien hacer estas reflexiones. ¿Qué consejos podríamos dar para manejar estas expectativas personales que muchas veces tenemos? Tanto las nuestras como de los demás, durante la Navidad. No sé si me he explicado bien. Igual es un poco… 

Ana: En cuanto a la Navidad te refieres en cuanto a tengo que estar bien y todo esto, ¿no? 

Ana: Bueno, pues quizá los meses previos, ¿no? Podemos prepararnos un poco a esas emociones que pueden venir. Sí, creo que la Navidad para mí va a ser complicada porque estoy viviendo un momento personal difícil. Intentar empezar a cuidarme esos meses antes, ¿no? Al final, la salud es algo global. O sea, por ejemplo, yo no puedo trabajar una persona, no puedo trabajar la ansiedad con una persona que no se está alimentando bien, que no cuida sus horas de sueño, que no cuida su entorno. Porque en todo eso, esos factores se están haciendo al final que esa ansiedad sea muchísimo más acusada y que el manejo sea mucho peor. Entonces, tenemos que ver la salud como algo global, que la salud mental es una parte, pero hay muchas otras. Yo siempre recomiendo movilidad, cuida tu entorno, cuida la parte laboral, porque son muchas horas. Entonces, tenemos que empezar esos meses previos a empezar a cuidarnos, a empezar a hacer cosas que nos agraden, tener esos momentos para nosotros mismos. Y si a nivel de pensamiento, tus pensamientos intrusivos sientes que no puedes manejarlos, busca ayuda, porque aquí en terapia trabajamos mucho esa parte cognitiva, esos pensamientos intrusivos, qué hacer con ellos. Todas las actividades que requieran de atención plena ayudan en el manejo de esos pensamientos negativos de ‘tengo que, esas navidades, madre mía, cómo voy a estar’ y demás. Por ejemplo, el deporte ayuda muchísimo. Cualquier actividad que tenga que ver con la creatividad, dibujar, estar con personas. Todo lo que requiera de mis sentidos me ayuda al manejo de esos pensamientos negativos que me rondan. Pero si ves que va a ser una época muy difícil para ti, que te sientes especialmente solo, especialmente derrumbado, oye, busca ayuda en esos meses porque seguro que un profesional te ayuda a manejarlo mucho mejor. 

Jota: Claro, si, si estamos ya en una situación preocupante, acude a un profesional que te va a ayudar y vas a poder manejar toda la situación mucho mejor. Yo quiero dar las gracias ya que estamos acabando el capítulo y llevamos todo el año sacando capítulos nuevos cada semana. Muchas gracias a todos los psicólogos que pasáis por aquí, como tú, Ana, y a todos los que nos escuchan todas las semanas. Es un reto seguir charlando sobre estas cosas, hablando de salud mental, que llegue a la gente, que cada vez nos concienciemos más. Así que yo quiero dar muchísimas gracias a todos los que estáis ahí y nada, que va a empezar dentro de poco otro nuevo año y seguiremos aquí grabando más podcasts para que los podáis seguir escuchando. Y nada, felicitar las fiestas a todo el mundo, felicitar el año. Dentro de muy poquito estamos en 2024 y seguiremos grabando más capítulos. 

Ana: Pues sí, felices fiestas a todos. Muchísimo apoyo a esas personas que para ellos es una época difícil del año. Pensad en eso, que es un periodo de tiempo muy limitado en vuestras vidas. Podéis con ello, cuidaros en todos los niveles, buscar ayuda si lo necesitáis. Muchas gracias por tenerme. Me encanta estar aquí charlando sobre esto, que nos escuchen. Y bueno, pues espero que el inicio de año de todas las personas que nos oyen sea maravilloso. 

Jota: Efectivamente, que todo el mundo lo pase súper bien y empiece súper bien el año. Pues nada, nos vemos pronto en otro capítulo, Ana. 

Ana: Nos vemos pronto. Chao. 

Jota: Chao, chao. 

Ana: Adiós.

Ana Ballesteros psicologa Online

Autor: Ana Ballesteros

Ana Ballesteros es una experimentada psicóloga especializada en las áreas forense y sanitaria. Su trayectoria abarca la atención a menores y adultos, y actualmente se dedica principalmente a la psicoterapia con enfoque cognitivo-conductual.

Puedes ver su perfil en este enlace.