¿Qué es un Súper-Anciano y cómo puedes convertirte en uno?

Un súper-anciano, es una persona de al menos ochenta años que conserva las habilidades y la capacidad de memoria de una persona como mínimo treinta años más joven. Esta población se encuentra muy lejos del rango de habilidades de memoria “normal” para personas de esta edad.

Todavía hay estudios sobre las diferencias cerebrales de los súper-anciano y, si bien es probable que exista un elemento biológico que explique por qué una persona se convierte o no en una, los hábitos de vida son capaces de mejorar las posibilidades de que esto suceda.

La historia de los Súper-Ancianos

Este término fue acuñado por el Centro Mesulam de Neurología Cognitiva y Enfermedad de Alzheimer, que está ubicado en la Facultad de Medicina Feinberg de la Universidad Northwestern. Esta definición es la de “adultos de más de 80 años que tienen la capacidad de memoria de personas que son tres décadas más jóvenes”. Acuñaron el término en el año 2008.

El Centro Mesulam está llevando a cabo estudios para determinar los factores genéticos, cerebrales y de estilo de vida que ayudan a una persona a retener la memoria mucho mejor que otras. Las tácticas de investigación incluyen imágenes cerebrales, estudio de la sangre, encuestas en papel y donación de cerebros.

Señales de ser un Súper-Anciano

Desde el punto de vista de una persona común, hay un signo principal de ser un súper-anciano: Recuerdas más que otras personas de tu edad. Pero desde una perspectiva científica, hay numerosos factores que determinan si lo eres o no. Las personas de más de ochenta años que son súper-ancianos son las siguientes:

  • Al tomar las imágenes, el cerebro parece entre veinte y treinta años más joven que la edad que tiene.
  • Resistencia al encogimiento cortical, lo que significa que el cerebro no se ha encogido, lo que es conocido como atrofia, de la forma natural en que suele pasar.
  • Pérdida de un 1,06% del volumen cerebral anualmente, en comparación con el 2,24% de otros ancianos.
  • El cerebro tiene un nivel más alto de un tipo específico de neuronas, llamadas neuronas Von Economo.
  • Las fibras de estos cerebros no se enredan de la forma que marcan la enfermedad de Alzheimer.

¿Puedes convertirte en un Súper-Anciano?

A pesar de que los estudios sobre los súper-ancianos siguen en marcha, no hay duda de que ciertos factores para ser uno de ellos son probablemente biológicos. De esta forma hay ciertas personas que nacen con un intelecto superior al de otras, es seguro asumir que hay cuerpos y cerebros que simplemente están inclinados a resistir ciertos síntomas de envejecimiento mejor que otros.

No obstante, a pesar de saber que probablemente exista un componente genético para llegar a ser un superagente, el Centro Mesulam de Neurología Cognitiva y Enfermedad de Alzheimer cree que los factores relacionados con el estilo de vida desempeñan un papel en la retención de las células cerebrales. Echemos un vistazo a las propuestas que hacen para que tu cerebro permanezca lo más fuerte posible a medida que envejeces.

Cómo mejorar tu memoria a medida que envejeces

Hay varios hábitos de estilo de vida diferentes que podrías adquirir para aumentar tus posibilidades de convertirte en un súper-anciano. A pesar de que estos hábitos de estilo de vida no garantizan que te conviertas en uno, la buena noticia es que todos constituyen hábitos saludables que conviene adoptar en general. Tienen el potencial de aumentar tu bienestar, felicidad y estado físico, aparte de ayudar a mejorar tu poder cerebral y tu memoria.

Desafíate mentalmente

Para mantener tu cerebro fuerte, es importante realizar actividades que te exijan salir de tu zona de confort. La neuroplasticidad es la capacidad de nuestro cerebro para cambiar cuando aprendemos cosas nuevas; eso significa que el acto de aprender algo nuevo permite que tu cerebro cambie físicamente.

Por supuesto, no tienes que hacer nada desagradable para desafiar a tu cerebro: El objetivo es ser capaz de hacer cosas que estén fuera de tu zona de confort, ¡no que te hagan sentir miserable! Hay muchas formas de mantener tu cerebro fuerte con actividades que disfrutas. Varias formas que puedes elegir para desafiarte mentalmente son:

  • Estudiar un nuevo idioma.
  • Tomar una clase en línea o en persona.
  • Practicar juegos de palabras, completar rompecabezas o juegos de mesa.
  • Romper la rutina, por ejemplo, tomando nuevas rutas para hacer recados.
  • Aprender una manualidad, cómo tejer o hacer ganchillo.

Sé activo

Es bien sabido que el ejercicio es bueno tanto para la salud física como para la mental, así que no es de extrañar que los súper-ancianos tiendan a ser activos. Pero no tienes por qué ir al gimnasio si no es una actividad que te gusta. Hay muchas formas de ser activo, y si haces las que más te gustan, es más probable que permanezcas con ellas a lo largo del tiempo.

Entre las actividades que no son ejercicios calisténicos o de musculación estándar, pero que elevan el ritmo cardíaco y son beneficiosas, están las siguientes

  • Bailar.
  • Natación u otras actividades acuáticas.
  • Senderismo.
  • Caminar.
  • Subir las escaleras en lugar de utilizar el ascensor.
  • Deportes.
  • Jugar a los bolos.
  • Frisbee.

Come nutrientes vitales

Así como es de conocimiento popular que ser activo es bueno para la longevidad, también debes saber que comer bien te ayuda a llevar una vida más nutrida. Ciertos nutrientes son especialmente buenos para el cerebro, y otros pueden mermar la capacidad de rendimiento. A parte de consumir menos azúcar, deberás asegurarte de consumir cantidades suficientes de los siguientes nutrientes que ayudan a tu cerebro a prosperar.

Está demostrado que estos alimentos ayudan a proteger tu cerebro del deterioro:

  • Verduras de hoja verde, como la lechuga, las espinacas y la col rizada.
  • Pescado graso.
  • Café y té.
  • Bayas.

Sé social y disfruta de la vida

El equipo de Northwestern señala que “los súper-ancianos tienden a informar de fuertes relaciones sociales con otras personas”. En realidad, es bueno para el cerebro mantener las conexiones sociales a medida que envejeces, y el cerebro se beneficiará de socializar con otros en persona.

Mantener la conexión es una excelente opción en general para tu salud mental, ya que te ayuda a evitar la soledad y la depresión.

Al pasar tiempo con los amigos, los súper-ancianos saben que deben estar centrados en algo más que un estilo de vida saludable: también se divierten. Muchos consumen alcohol de forma moderada, lo que, siempre que no se consuma en exceso, ayuda a reducir el riesgo de contraer la enfermedad de Alzheimer.

Sea lo que sea lo que te guste, asegúrate de dejar espacio en tu agenda para ello. Y si lo disfrutas con un amigo, mejor.

Es normal experimentar un deterioro cognitivo a medida que envejecemos, y las mujeres pueden experimentar una aparición más rápida que los hombres. Si has notado que tu memoria no es tan fuerte como antes, merece la pena que acudas a un profesional para descartar una enfermedad como el Alzheimer.

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