Jota: Muy buenos días a todos, aquí estamos de nuevo con un capítulo más para hablar sobre la salud
mental y hoy estamos de nuevo con nuestra amiga Paula Massa que os hago un resumen, aunque ya
la conocéis todos, que es psicóloga experta en terapia online, con casi 20 años de experiencia
haciendo terapia y más de 6 años haciendo terapia online. Es supervisora de casos y apoyo del
equipo de Psicología Online Avanzada. Muy buenos días Paula, cómo estás?
Paula: Encantada de estar aquí contigo, Jota.
Jota: Muy bien, muy bien. Estupendo. Hoy vamos a hablar sobre una herramienta que nos puede ayudar en
nuestro día a día. Bueno, ahora nos cuentas un poquito más, pero creo que lo utilizas con tus
pacientes en terapia, pero también puede ser una herramienta útil para gente que no está en terapia,
ahora nos cuentas como un poquito más. Es así?
Paula: Si, se trata del diario.
Jota: El diario efectivamente, efectivamente, el diario, pues si quieres, cuéntanos un poquito así un
resumen de esto que el diario a mí ya me viene algo a la cabeza, pero que es el diario del que vamos
a hablar.
Paula: Pues supongo que eso que te viene a la cabeza es lo que realmente es. Es ese diario que venimos
haciendo desde que éramos niños. Es verdad que cuando ahora se lo propones hacer a un adulto, ya
lo hacemos con otro tipo de conciencia, no? Es un diario un poquito más profundo en el cual no solo
contamos, qué es lo que nos pasa, sino cómo pensamos y cómo sentimos ante lo que nos pasa. En
eso consiste principalmente el ejercicio. Es un diario porque lo hacemos todos los días.
¿Qué es lo que tendríamos que dejar reflejado en El Diario?
Jota: Muy bien, o sea que se trata de ir escribiendo diariamente, no sé si todo, algo en concreto, o qué es lo
que tendríamos que dejar ahí reflejado en el diario?
Paula: Pues principalmente son nuestros pensamientos y nuestros sentimientos. Y bueno, y empezamos,
quizás por escribir los que más destacan a lo largo del día. Es una de las primeras funciones para las
que sirve un ejercicio así, para podernos descargar, para podernos desahogar y poder liberar. Pero
luego tienen otras otras funciones.
Jota: Bien, bien, vamos a ir desgranando poco a poco todas esas esas cosas. Cuéntanos, para qué es
bueno hacer un diario?
¿Para qué es bueno llevar un Diario?
Paula: Mira, realmente el diario en terapia, en psicología lo llamamos el nombre más técnico que le damos
al diario es el registro autobiográfico. Lo que estamos haciendo es un registro de lo que está
transcurriendo en nuestra vida. Y como te decía antes, en realidad es la primera herramienta que más
nos sirve para una toma de consciencia. Cuando somos conscientes de cómo pensamos, de cómo
sentimos, nos es mucho más fácil cambiar si estamos teniendo algún pensamiento incorrecto.
Jota: Bien, entonces, de qué forma ayuda a la persona que lo está escribiendo en su día a día? Cómo
consigue esta ayuda de estar plasmando lo que lo que le ocurre?
Paula: Al final nos ayuda en cuatro perspectivas: en la descarga, en el desahogo, como te decía antes,
porque es muy fácil identificar qué es lo que pensamos y sentimos en situaciones de lo más
cotidianas. Desde un “he discutido con mi pareja” hasta un “me ha tocado la lotería”. Son situaciones
donde es muy fácil identificar qué es lo que pensamos y qué es lo que sentimos. Nos ayuda a
descargarnos, nos ayuda a liberarnos, nos ayuda a materializar eso que nuestra cabecita muchas
veces puede estarle dando vueltas. Pero también, como te decía antes, no solamente sirve para eso,
para descargarnos y desahogarnos, también nos hace estar más conscientes de cada uno de los
pensamientos que estamos teniendo. Esto se llama estar más presentes en nuestro presente. Esto
qué es lo que hace? Evitarnos que estemos pensando hacia el futuro, que son los pensamientos que
nos generan ansiedad, o hacia el pasado que son los pensamientos que sin embargo nos pueden
llegar a llevar a un estado depresivo. También nos va a ayudar un ejercicio como el diario a la
Relativización, porque si yo escribí sobre aquello que discutí con mi pareja, como pensaba y cómo
sentía en ese momento, en el momento de la descarga, en el momento del desahogo. Luego lo puedo
leer días más tarde y eso me puede ayudar a percibirlo de manera diferente. El hecho de que tenga
distintas opciones de posicionamiento ante una misma situación me va a ayudar a que también
relativice aquello que me está pasando. Y luego, por último, una de las funciones más importantes
para mí, la más importante, es la del encontrarnos con nosotros mismos. Es un ratito que nos
dedicamos para pararnos, para conversar con nosotros mismos, con nosotras mismas y podernos
preguntar qué es eso que estamos necesitando que nosotras mismas nos podremos proporcionar.
¿Cuándo se utiliza el Diario en terapia?
Jota: Muy interesante. Fíjate que curioso esta herramienta que a mí me suena un poco a que la hagan
niños, no? Lo de escribir un diario y parece que es una herramienta que nos puede servir muy bueno
para para muchas cositas. Esta es una herramienta que se suele utilizar en terapia o es algo puntual
con distintas problemáticas? Cuando se utiliza este diario o registro que veo que la has llamado
registro también?
Paula: Si, bueno, ya te digo, técnicamente lo llamamos registro autobiográfico, pero al final es eso, es un
diario. Y claro que si, es algo de lo más sencillo, que lo podría ser perfectamente un niño, porque no
se trata nada más que eso, que ir contando qué es lo que va transcurriendo en el día a día de nuestra
vida. Yo lo utilizo prácticamente en todas mis terapias. Depende mucho del paciente, hay pacientes a
los que no les gusta escribir, que no se comprometen con ello. Y bueno, como siempre les digo yo,
ejercicio que se propone en terapia, tanto si lo hacemos como si no, también va a tener su
significado. Entonces, cuando lo estoy proponiendo, si alguien no lo hace, también entrar en él porque
no lo está haciendo, me resulta muy interesante. Ya me está dando una información, pero de
primeras lo propongo prácticamente a todos. De hecho, tengo fama de ser muy pesada con el tema
de la escritura.
Jota: Muy bien. Entonces, hay alguna problemática en concreto que sea más interesante usar lo que en
otras o o da igual?
Paula: Pues depende, depende de la problemática. Podemos ahondar más, ya te he hablado que tiene como
cuatro objetivos fundamentales a la hora de hacerlo. Entonces, dependiendo de la problemática,
podemos ahondar más en cada uno de sus objetivos. Quizás se cumpla más alguno de ellos, por
ejemplo, en los estados depresivos sé y me consta que a las personas que están bajo un estado
depresivo les va a costar mucho más hacer un ejercicio así, pero sin embargo, puede ser un buen
ejercicio que les ayude a quizás hacer un cambio de foco. Muchas veces hay un ejercicio en terapia
que proponemos, que es el de el cambio de foco hacia las cosas positivas. Quizás escribir cinco
cosas positivas que hayan transcurrido en tu día a día. Ese ya puede ser un contenido para para tu
diario. Quizás no escribas nada más, pero si estás escribiendo esas cinco cosas positivas, te puedes
asegurar que poquito a poco vas a ir cambiando el foco y la perspectiva de cómo estás viendo tu
vida. Por ejemplo, eso en un estado depresivo. Luego quizás también pueda ayudar en casos más
técnicos a la hora de hacer un registro. Por ejemplo, en el tema de las fobias, cuando una persona
que quiere superar una fobia se está enfrentando a aquello que le genera su miedo, el contarlo, el
contar cómo lo está viviendo, cómo se está enfrentando, si ha sido capaz o no, también puede ser
por medio de esa herramienta tan importante el diario, las personas que están en un proceso de
superación o en un proceso de desintoxicación. Por ejemplo, en una deshabituación tabáquica.
Quizás en dejar de fumar un diario puede ser de grandísima utilidad para también poder percibir a un
medio plazo cuáles son sus avances, cuál es la evolución que van llevando. Quizás en otro tipo de
procesos, imagínate un montón, una pérdida de peso, si lo que nos estamos planteando quizá sea
eso, el adquirir unos buenos hábitos alimentarios, en nuestro diario, también lo podremos ver de una
forma mejor plasmado. Tenemos que tener en cuenta que una herramienta como es el diario, nos
permite ver las cosas desde fuera, nos permite ver las cosas con mayor objetividad. Nos va a hacer
verlas con mayor claridad.
Jota: Además, aquí me has hecho ver que el enfoque se puede dar, hablamos de diario, registro, pero que
sí puedes dar una pauta dependiendo de la problemática de que se haga de una manera o de otra,
que no siempre va a ser, simplemente escribe un diario y escribe lo que te apetezca. No me ha
parecido un detalle muy importante que si una persona está pasando por una depresión, lo que se le
pida es háblame de puntos buenos, no? De puntos positivos que te están pasando. No sé si aquí
habría que descartar, no reflejes los negativos para que no piense en ellos. O bueno, me imagino que
dependerá del caso también.
Paula: Yo suelo ser bastante flexible, ya te digo. De primeras planteo el ejercicio bastante en abierto y en
función a lo que vaya saliendo, de ahí vamos sacando conclusiones. Por ejemplo, si una persona que
está en un estado depresivo, todo lo que escribes negro, todo lo que escribe está marcado en un tinte
muy dramático. Eso cuando luego lo leamos en consulta, él lo va a ver, lo va a observar y se va a dar
cuenta que quizás no sea tan negativo aquello que le está sucediendo, sino el cómo se lo está
contando. Puede llevar a muy buenas conclusiones.
¿Cómo ayuda El Diario en el proceso terapéutico?
Jota: Muy bien y entonces en el proceso terapéutico esto que están escribiendo como ayuda?
Paula: Bueno, pues como te decía, sirve, por ejemplo, para ver muy bien la evolución, para ver los avances.
Esto siempre es bueno porque sirve como un refuerzo para que la persona siga manteniéndose en la
terapia, para que se dé cuenta de que la terapia está sirviendo. Por ejemplo, ahí ya a un medio plazo
puede servirnos como una herramienta de empuje, como una herramienta de refuerzo. Te decía,
también sirve para momentos de descarga y de desahogo. Estemos pasando por lo que estemos
pasando siempre hay momentos de tensión, siempre hay momentos en los que necesitamos
liberarnos. Y precisamente porque muchas veces no sabemos cómo, vamos acumulando,
acumulando, acumulando y finalmente explotamos. Esta, por ejemplo, puede ser una causa de
nuestras crisis de ansiedad o estados de ansiedad generalizados. Entonces el diario nos puede servir
también como una medida preventiva para ello. Al mismo tiempo, lo que te decía antes, el poder estar
también más conscientes de nuestro presente, dándonos cuenta que realmente el presente es el
tiempo que existe y sobre el que podemos hacer cosas, nos va a permitir sentirnos mucho más
resolutivos, sentirnos mucho más efectivos, sentir que estamos tomando el control sobre nuestra
propia vida. Lo que te decía también de la relativización. Y por último, el encontrarte contigo mismo.
El poder tener esos momentos de diálogo contigo mismo. No sé si responde a tu pregunta.
Jota: Sí, sí, sí. Además, me parece muy interesante que repitieramos los cuatro puntos en los que se ayuda
para que nos quede claro. Si quieres darnos muy claramente uno a uno los titulares, aunque ya los
hemos nombrado para que nos queden muy claro.
Paula: Para que no nos olvidemos, para que no nos olvidemos. Además yo es así como lo explico en
consulta cuando propongo hacer el ejercicio, que de primeras sorprende mucho, porque cuando digo
venga, vamos a dar un paso más en la introspección, en esa autoobservación que propongo desde el
primer día y digo y ahora vamos a escribirlo. Y digo vamos a escribirlo a modo de diario, me dicen:
como cuando era pequeña? Escribo un diario, como cuando era pequeña? Sí, vale, vamos a escribir
un diario como cuando eras pequeña, no tanto de lo que te pasa, sino de cómo lo piensas y cómo lo
sientes cuando te pasa. Obviamente tendremos que hablar del referente. Y entonces ahí es cuando
escribo, cuando explico que escribir un diario, que hacer un ejercicio de este tipo nos va a servir
desde cuatro perspectivas. La primera de ellas va a ser la descarga, el desahogo, lo podemos poner
así como título.
Jota: Muy bien.
Paula: Digo que es la primera, no porque sea la más importante, sino porque es que es la primera que
tendemos a cumplir. Es para lo que en un primer lugar empieza a servir un ejercicio así.
Jota: Un momento, entiendo que aquí habrá gente que lo haga de muchas maneras. Cuando hablas de
desahogo, entiendo que lo que está escribiendo la persona es una redacción en plan muy
desarrollado, lo que le está pasando y cómo lo está viviendo, porque puede haber gente que a lo
mejor simplemente ponga: ‘he tenido una discusión, me he sentido mal’ y no profundice más,
simplemente deje reflejado en dos palabras algo que le ha pasado y haya gente que entre en la
discusión, todo lo que ha ocurrido, las frases que se han dicho, los sentimientos en profundidad.
Puede haber un enfoque muy diferente entre distintas personas. Esto ocurre, imagino pides tú que
desarrollen o cómo, como sería, por ejemplo, en este caso.
Paula: Hombre, yo en principalmente incido en que ahonden más en lo que piensan y en lo que sienten. Así
es como les servirá como descarga y como desahogo. Pero aunque parezca mentira, personas muy
escuetas, personas que sintetizan mucho lo que les está pasando, también les libera, porque quizás
no estén acostumbrados a nunca hablar de ello. El mero hecho de que estén contando: ‘hoy he
discutido’, quizás ya sea un momento de liberación para ellos. Insisto mucho, insisto en que
profundicen en sus pensamientos. Además, ya cuando propongo un ejercicio como el diario,
llevamos un tiempo de terapia. Ya les he explicado a los pacientes que bien o mal, no es una manera
de sentirse que nos podemos sentir bien de muy diversas formas. Podemos estar ilusionados,
podemos estar esperanzados, podemos estar contentos, tranquilos, pero hay muchas formas de
sentirse bien. Igual si nos sentimos mal, podemos estar tristes, podemos estar nerviosos, podemos
estar enfadados. Son formas muy diferentes de sentirse mal.
Jota: Muy bien, tenemos el desahogo. Y cuál sería el siguiente punto?
Paula: Pues el siguiente objetivo yo lo llamo estar más presentes en nuestro presente, y este viene del hecho
de que no siempre están pasando cosas que destacan frente a lo cotidiano. Yo cuando propongo un
diario, no quiero que sólo y exclusivamente se centren en lo especial, no quiero que solo y
exclusivamente se centren en el desahogo. Entonces, como vamos a escribir todos los días, todos
los días nos obligamos a escribir algo. Al final nos damos cuenta que pensamos y sentimos en
situaciones de lo más cotidianas, incluso en el momento de ir a comprar el pan. Como voy a escribir,
como tengo que poner relleno, tengo que poner contenido a un ejercicio que estoy escribiendo todos
los días a mi diario. Pues me voy a preguntar como pienso y como siento en este tipo de situaciones
tan cotidianas. Quizás si nos hacemos esa pregunta podemos descubrir cosas interesantes, a lo
mejor yo en mi trayecto a la hora de ir a comprar el pan, estoy pensando en el duro día de trabajo que
tuve ayer o en la semana tan dura de trabajo que se me viene por delante, o en aquel conflicto que
tuve con mi pareja, o en la pérdida y fallecimiento de mi abuelo hace tres años. Ahí me puedo dar
mucha cuenta de dónde y hacia dónde se enfocan mis pensamientos y si están más o menos
ubicados con el momento presente en el que me encuentro. Porque a lo mejor después, si lo leo, me
puedo volver a decir en próximas ocasiones cuando vayas a comprar el pan, fijate, quizás sólo en el
trayecto vete contándote un poco lo que está pasando en este momento. Quiero decir con esto que
ese estar presentes en nuestro presente puede ser un ejercicio muy interesante de identificación en
cuanto a cómo está siendo nuestro pensamiento, que ya sabemos que es el responsable muchas
veces de nuestros estados de malestar.
Jota: Entiendo que este punto en el que estamos presentes en nuestro presente es para ser más
conscientes de nuestra vida en nuestro día a día y no estar pensando ni en el pasado ni en el futuro. Y
esto entiendo que es bueno, no es mejor que estar pensando en el pasado o esperando a que llegue
algo que puede o no llegar.
Paula: Claro. Fíjate Jota que hoy en día están en auge los ejercicios basados en meditación, en mindfulness
y al final esto es lo que nos vienen a contar este tipo de ejercicios, no? Que si centramos nuestro
pensamiento en el momento actual, realmente es donde vamos a tener el control sobre nuestra
propia vida. Que cuando pensamos en el futuro y esto está científicamente demostrado,
generalmente nos vamos a generar estados de ansiedad y que pensando en el pasado, tendemos
más a estados depresivos. Cuando nos centramos en el presente es cuando estamos teniendo un
estado anímico equilibrado.
Jota: Mmmm, y teniendo estos dos puntos que más otros dos puntos, porque me parece muy interesante
todo, todo esto que hemos conseguido, que más puntos tenemos con con este diario que escribimos?
Paula: Pues viene un tercero que este llega como más a un medio plazo. No tiene que ser un plazo muy
lejano, pero es un punto en el cual ya no solamente vamos a escribir qué es lo que pensamos y qué
es lo que sentimos, sino en el cual también nos damos la opción de leer. Y cuando nos está entrando
esa misma información por un canal diferente, el visual, nos puede ayudar a percibir las cosas de
manera diferente. Yo a este punto le llamaría el punto de la relativización. Vale, porque lo que vamos
a hacer es darnos distintas opciones de posicionamiento ante un mismo hecho, ante una misma
situación. Y vuelvo a poner el mismo ejemplo de antes. Si yo discutí con mi pareja y en el momento
de desahogo cuento que pensé, así que me sentí de esta manera y luego lo leo días atrás, me va a
entrar por un canal diferente, el visual, y me puede ayudar a percibirlo de manera diferente. Eso sin
duda me va a dar unas conclusiones que puedo aplicar en posteriores ocasiones. Tengamos en
cuenta que somos muy simples y que muchas veces, aún siendo distintas las situaciones,
reaccionamos de la misma manera. No nos viene mal tener esta reflexión fruto de la relativización
para poder aplicar quizás una manera diferente de actuar o de reaccionar ante ese tipo de
situaciones.
Jota: Claro, para esto por lo menos has tenido que haber escrito anteriormente para poder releerlo y tener
ese nuevo enfoque.
Paula: Efectivamente.
Jota: Claro, también imagino que durante las sesiones en terapia, si habláis de este diario, de este registro
también, no solamente esa persona de manera autónoma, sino que se podrá tratar en consulta y
apoyar o desmontar ideas que pueda tener el paciente, no? De un tipo u otro.
Paula: En terapia, en consulta, lo que hacemos es reflexionar, no? Sobre los cambios que vamos
observando. También decimos a veces del diario que es como una fotografía emocional de los
momentos. Es decir, es como cuando tomamos una foto de un sitio, de un lugar y luego lo vemos y
luego vemos esa foto y nos damos cuenta que a lo mejor había algún detalle que se nos había
escapado y hasta no verlo en la fotografía no nos habíamos dado cuenta. Pues con el diario pasa un
poco esto, que si estamos escribiendo lo que en un momento nos está pasando y luego lo leemos,
podemos observar determinados detalles e incluso datos trascendentales para nuestra mejora, para
nuestro bienestar, con lo que por tanto nos lleva a muy buenas conclusiones.
Jota: Y nos falta un punto todavía.
Paula: Para mí el más importante, es el momento de encontrarte contigo mismo, es el momento de estar
contigo mismo. Lo comparo muchas veces con esas personas que deciden irse a un monasterio seis
meses o al Tíbet a encontrarse consigo mismos, pues con el diario en lo que vamos a hacer es eso
mismo, pero simplemente a lo mejor con diez minutos al día puede ser suficiente. Va a ser el
momento que te dediques para tu propio diálogo, para tu auto diálogo, para tus reflexiones, para tu
introspección, para preguntarte a ti mismo qué es lo que estás necesitando y cómo tú a ti mismo te
lo puedes proporcionar. Es un momento de escucha, de auto escucha. Es un momento fundamental.
Jota: Pues ahora sí que tenemos un repaso de los cuatro puntos que si no me he quedado mal con ellos,
son el desahogo, el estar presente en tu presente, relativizar y encontrarse a uno mismo.
Paula: Exacto.
¿Puede ayudar El Diario a una persona que no va a terapia?
Jota: Todo esto es un trabajo que tú pides en terapia y que y que guías al paciente según vayas
encontrándote datos. Y todo esto que nos has ido contando le puede servir a una persona que no va
a terapia?
Paula: Por supuesto. De hecho, yo le diría a la persona que no va a terapia y que decida hacer un ejercicio
así, que ya sabiendo un poco cuáles son esos cuatro objetivos, a medida que lo vaya haciendo él
mismo se pregunte cuál de los cuatro está en cada momento, en cada día que escribe, más
cumpliendo? Pues si hoy he necesitado un poquito más de desahogo y me he liberado. Si hoy, sin
embargo, porque no tenía mucho donde escribir, me he puesto a observar como pienso en una
situación de lo más cotidiana y me he dado cuenta que tengo esta tendencia a la hora de mi
pensamiento. Si hoy, por ejemplo, he llegado más a esa relativización o a esos avances que bueno,
no hace falta ir a terapia, muchas veces nos proponemos superarnos en muchas cosas. El hecho de
que estemos haciendo un diario para ello nos ayuda un poco para darnos cuenta de esa evolución
que estamos llevando a cabo. Y en el punto de la relativización, porque ya llevamos un tiempo escrito,
también podemos llegar a observar un poco esto y sobre todo eso que tengan esos ratitos. O sea,
aquí lo importante quizás no sea tanto lo que plasmamos en el momento de encontrarnos con
nosotros mismos, sino simplemente el momento. El darnos ese momento ya es un momento que da
muchísima fuerza, que da muchísima energía y que puede llevar a muy buenas conclusiones. Claro
que le puede servir a cualquier persona que no acude a terapia y esa era la finalidad de hacer este
podcast de hoy. Me parecía muy interesante el que un ejercicio tan simple, tan sencillo y tan
accesible pudiese llegar un poco a todos.
Jota: Sí, una herramienta que parece muy, muy útil, no? Cómo lo has visto esto en terapia con tus
pacientes, cuando les propones este ejercicio, en general, se abren fácilmente, les cuesta? Qué
respuesta tienes de ellos normalmente?
Paula: Hay de todo, hay de todo. Depende mucho de los pacientes y del caso, el motivo por el que estamos
proponiendo el ejercicio. Yo cuando propongo el ejercicio de primeras, lo que propongo es que luego
trabajemos con él, con el diario en nuestro día a día, en consulta, pero de distintas formas, ellos
eligen. Vale, podemos hacer varias cosas. Por ejemplo, que el paciente lea lo que ha escrito durante
esos días en que ha estado haciendo su diario. Cuando nos vemos en consulta puede leer como han
transcurrido esos días. También puede haber traído una lectura previa y haber sacado él sus propias
conclusiones, pues porque no quiera leerlo en consulta directamente, porque considera que hay
cosas muy íntimas. Además, yo aquí también propongo muchas veces, bueno lo propongo siempre
vaya, el hecho de que cuando escriban el diario, cuando hagan un ejercicio así, no piensen en
absoluto que lo pueda leer nadie, que no se preocupen lo más mínimo, ni por faltas de ortografía, ni
por redacción, ni por cómo expresan. E incluso, por ejemplo, en el momento de la descarga, en el
momento del desahogo, que no se corten. O sea, que saquen las palabras que les haga falta para
poder expresar que es lo que ahí están sintiendo, porque será mucho más liberador. Entonces, claro,
muchas veces si has tenido un momento de estos, a lo mejor luego te da vergüenza leerlo delante de
alguien, no? Entonces lo que aquí propongo es que mejor traigan una lectura previa y saquen sus
propias conclusiones para que luego lo comentemos en consulta. En cualquier caso, como buen
registro autobiográfico que es, también nos es un buen recordatorio, pues a lo mejor no lo estamos
leyendo directamente día a día, que es lo que transcurre. Pero quizás el paciente recuerda que hubo
un día en el que algo que se propuso lo pudo llegar a conseguir. Y cuando nos dirigimos a su diario, al
día en el que eso transcurrió, podemos observar cuáles fueron los elementos que le ayudaron a ello.
O sea que también sirve como una herramienta de recordatorio. Es un buen elemento para recordar.
Jota: Me imagino que de todas formas ya pasa en el diario cuando somos niños, no? De tenerlo con un
candadito o tenerlo algo protegido. Siempre tendrás el temor de que si no vives solo alguien te lo
pueda encontrar o leer. Y no se hasta que punto habrá gente que no escriba del todo liberado, que
imagino que será un inconveniente a la hora de, si no lo haces, no? De la ayuda.
Paula: Yo intento pedir que no sea así que por favor que confíen, que se aseguren de su total privacidad, de
su total intimidad. Que pidan respeto también a los que convivan con ellos para que la herramienta
sea el cien por cien útil.
Jota: Y una una duda que me surge aquí. Esto lo pides en terapia a la gente, pues como nos dices, optan
por distintas opciones, siguen, continúan con el proceso de escribir el diario algunas de estas
personas para siempre o o solamente durante el tiempo que dura las terapias? Qué ocurre con esas
personas que se acostumbran a escribir el registro diario?
Paula: Yo digo que es un ejercicio que es bastante adictivo. Al final, cuando ya te has habituado a ello, es
bastante difícil que lo saques de tu vida, porque como trae tan buenos resultados por los efectos que
produce, te cuesta tenerlo que dejar de hacer. Y para qué lo vas a dejar de hacer si te viene muy bien.
Aunque la terapia haya finalizado, aunque hayamos cubierto nuestros objetivos, aunque ya
consideres que no tienes que seguir viniendo a terapia, siempre vas a tener esa herramienta ahí y es
muy importante tenerla presente.
¿Es mejor escribir el Diario a mano o de forma telemática?
Jota: Muy bien, pues oye, me has descubierto una herramienta muy, muy interesante, de muchísima ayuda,
como estamos viendo, que desconocía que tuviéramos este potencial con algo tan, tan sencillo. No
sé si hay algo que quieras añadir que se nos esté escapando, que no hayamos comentado sobre
esto.
Paula: Bueno, una pregunta que me hacen muy frecuente cuando propongo un ejercicio así, es si es mejor
escribirlo a mano o escribirlo de forma telemática. Ya sabemos que hoy en día en el móvil tenemos
herramientas y un poco por lo de la privacidad que antes preguntabas, no? Pues a lo mejor es más
seguro si lo llevamos en nuestro móvil, en nuestros dispositivos personales, aquello que estemos
escribiendo. Pero por otro lado, sin embargo, sí que se recomienda el que su escritura se haga a
mano. Por qué? Porque es una buena forma de conectar el movimiento de la mano en el momento de
la escritura con lo que está pasando y procesando nuestro cerebro. Es una buena forma de hacer esa
conexión cuerpo-mente que al final es un sistema, no? Entonces el hecho de ver de una forma tan
conectada eso, nuestra mente con el movimiento de nuestro cuerpo, aunque sea un movimiento
simplemente de nuestra mano al escribir, puede ser, puede ser algo que ayude mucho, por ejemplo, a
la liberación, en el momento de la descarga y el desahogo, es como una forma de canalización. Esas
personas que un día de estrés, un día de tensión, por ejemplo, se van a correr, saben perfectamente lo
que supone ese ejercicio físico, ese movimiento tan dinámico para poderse descargar, para poder
canalizar todo el estrés y toda la tensión que hayan podido haber recibido durante el día. Pues
aunque no sea un ejercicio tan fuerte, el escribir con la mano también es canalizador en este sentido
de tensiones, de ansiedades, de estrés. Hombre, cuando escribimos en un teclado o escribimos en el
móvil, no hacemos el mismo tipo de movimiento, pero algún movimiento es. Y teniendo en cuenta los
cuatro objetivos de los que hemos hablado durante todo el podcast, no pasa nada si decidimos
utilizar una de nuestras aplicaciones del móvil para poder hacer nuestro diario, aunque siempre
tengamos en cuenta que es preferible si lo hacemos a mano en escritura manual.
Jota: Muy bien. Tomamos nota que hay que escribir a mano. Genial, pues oye Paula, me ha encantado
descubrir esta herramienta. Espero que a todos os haya pasado lo mismo que a mí y simplemente
recordaros que si queréis hacer alguna propuesta o algún comentario relacionado con el podcast,
nos podéis escribir a podcast@psicologiaavanzada.es y ahí escucharemos todo lo que nos vayáis
diciendo para futuros podcast o cualquier recomendación que nos hagáis. Un saludo, Paula, y nos
vemos pronto en otro capítulo.
Paula: Por supuesto Jota, muchas gracias por haberme invitado.
Jota: A ti. Hasta luego.
Paula: Adiós