Si hace un siglo abordáramos la adicción, estaríamos hablando de un fallo moral arraigado en la personalidad. Afortunadamente, la terapia y el asesoramiento han evolucionado con el tiempo, y la adicción ya sea al alcohol, a las drogas o a otras sustancias y actividades. Se considera hoy una enfermedad.
La adicción se ha categorizado así gracias a los investigadores que investigaron qué la causaba, cómo reconocerla y cómo ayudar a aquellos que la padecen.
Lo que hace que la adicción se distinga de otras enfermedades mentales y físicas es que la persona que la padece apenas puede reconocerla como enfermedad.
De hecho, reconocer que tienes una adicción es bastante difícil, en comparación con reconocer si tienes depresión o ansiedad. Dado que nuestro objetivo aquí en Psicología Online Avanzada es ayudarte con las habilidades de afrontamiento para llevar una vida mejor, te facilitamos esta guía completa sobre la adicción.
A continuación te explicamos cómo saber si tienes una adicción y cómo tratarla.
Índice
Revisa tu lista de prioridades
Llevamos a cabo nuestros días y nuestras vidas con cierto grado de costumbre y rutina, aunque unos más que otros.
De lo que muchos no sois conscientes es de que estamos condicionados a hacer estos “recados diarios” o tareas en función de las prioridades que nosotros mismos o como sociedad creamos.
Netflix, los videojuegos y las redes sociales no son las únicas cosas a las que nos podemos volver adictos. También hay personas adictas al trabajo, y eso precisamente puede causar multitud de problemas.
Lo primero que debes comprobar es tu lista de prioridades.
¿Hay una cosa tan importante que debes hacerla todos los días, por encima de todo lo demás?
¿Se ha convertido en la forma de vivir tu vida?
¿Te imaginas sin hacerlo?
Aquí podríamos hablar de beber, por ejemplo. No sólo de beber una cerveza de vez en cuando, sino de convertir en un hábito el consumo de alcohol de forma constante, sostenida y excesiva.
Puede que sean las drogas ilícitas, la cafeína, o una actividad como el tiempo de pantalla, el sexo o el porno.
Si encuentras que hay algo que sientes que debes hacer, y si hay una brecha entre eso y el segundo punto de tu lista de prioridades. Entonces es muy probable que puedas dejar de hacer muchas otras cosas importantes.
Esta es una de las señales de que puedes tener una adicción.
¿Cómo te sientes al hacer o dejar de hacer?
Muchas personas con una adicción experimentan el hacer las cosas a las que son adictos como una recompensa.
Por eso vale la pena que analices cómo te sientes. Estamos programados para sentirnos bien cuando hacemos algo que nos gusta. Al mismo tiempo, podemos sentirnos mal si no hacemos las cosas que tenemos que hacer, especialmente si no nos gusta hacerlas.
Las personas con una adicción pasan mucho tiempo haciendo una actividad que les gusta (o de la que no pueden prescindir). Y no se sienten mal por no hacer las cosas “obligatorias” de su agenda.
De hecho, es todo lo contrario; un adicto puede sentirse muy mal si no dedica tiempo a esa obsesión.
¿Hay cosas en tu vida que disfrutas haciendo porque te hacen sentir mejor y con más control, hasta el punto de no ver ninguna consecuencia negativa? Si es así, es probable que se trate de una adicción.
¿Tienes control sobre ello?
Como indicamos anteriormente, muchas personas disfrutan viendo la televisión o jugando a los videojuegos, pero no dedican todo su tiempo libre a ello. ¿Con qué frecuencia realizas una actividad concreta que te hace sentir bien? ¿Cuánto tiempo dedicas a ello?
¿Acabas por hacerlo bastante más de lo que habías planeado inicialmente? Si la respuesta a esta última pregunta es un “sí”, entonces se trata de lo que se conoce en los círculos psicológicos como “una compulsión que nunca es suficiente”.
Esto significa que no tienes control sobre ese tipo de comportamiento. En cambio, te está controlando a ti, lo que a menudo da lugar a la famosa frase “Sólo unos minutos más” o “Mañana haré todos los recados de hoy”.
¿Te encuentras en este escenario? Si es así, es muy posible que estés luchando contra una adicción.
¿Te encuentras realizando actividades aunque planees no hacerlo?
Las personas que no tienen adicciones (importantes) suelen ser capaces de crear horarios por sí mismas y cumplirlos. Hay ciertas desviaciones de vez en cuando, pero todo se considera dentro de un rango “normal”.
¿Cuándo una desviación del horario se convierte en un comportamiento de un adicto?
Si haces ciertos planes, y eres específico en no hacer “esa cosa” sólo para encontrarte volviéndo a ella y haciéndola aún más, probablemente eres adicto a ella. Los pensamientos de “me aseguraré de no caer en esta trampa mañana” o “me daré el gusto por última vez” suelen acompañar este escenario.
Esto se considera generalmente como una negación de libro.
¿Te sientes ansioso cuando no puedes hacerlo?
Hacer lo que más te gusta te hace sentir bien contigo mismo, casi como si nada más en el mundo entero importara.
No hay nada malo en que las personas puedan sumergirse tan profundamente en ciertas experiencias. Sin embargo, la mayoría de las personas no se sienten ansiosas si no pueden hacer algo que ayuda a desconectar durante un día o dos.
¿Cómo te sientes tú cuando no puedes dedicarte a ello? ¿Te sientes incómodo o incluso ansioso? Aquí tienes un gran ejercicio para evaluar lo importante que es ese asunto para ti:
Imagina que no puedes hacerlo durante un par de días. Cero actividades. Sin hacer nada.
¿Cómo te sientes?
Si experimentas emociones incómodas, esa actividad o comportamiento te tiene atrapado. Eso es adicción.
¿Cuál es el precio de hacer esta actividad?
Sí, la palabra “coste” implica dinero. Aunque determinadas adicciones pueden hacer un enorme agujero en el presupuesto de una persona, también pueden pasar factura en otras esferas de la vida. ¿Cuáles son los costes ocultos de la adicción que pueden escaparse tan fácilmente si tienes una adicción?
La vida de un adicto es una montaña rusa emocional en la que el miedo, la alegría, la felicidad, la culpa, la paranoia, la vergüenza, el éxtasis, el arrebato y el autodesprecio son pasajeros habituales.
Experimentar varios de ellos a la vez supone un tremendo coste emocional que a menudo provoca el desarrollo de una enfermedad mental subyacente.
El intelecto del adicto también paga el precio. Como lo único en lo que puede pensar la persona es en hacer una cosa determinada, no hay otras actividades creativas o intelectuales en la vida.
Los adictos suelen experimentar una incapacidad para resolver problemas. Esto complica aún más la situación en el futuro.
Las relaciones personales también se ven afectadas. Como los adictos dedican demasiado tiempo a los comportamientos y actividades propios de esa adicción, no suelen pasar suficiente tiempo con sus amigos y familiares.
En general, los adictos expresan menos interés en participar en interacciones significativas con otras personas, a menos que esté relacionado con lo que más les gusta hacer.
Si uno de los puntos anteriores se aplica a ti, es probable que estés lidiando con un tipo de adicción.
Cómo tratar la adicción
En ocasiones, los adictos son capaces de desenredarse con éxito de la espiral descendente de su adicción pasando por estas 6 etapas. La regla general que se aplica aquí es que cuanto más grave es la adicción, más difícil es recuperarse.
Sin embargo, hay personas que lo logran. Estos llamados “recuperadores naturales” tienen unas cuantas cosas en común.
Reconocer la adicción
El primer paso, y quizás el más importante, es aceptar el hecho de que eres un adicto. Al principio, esto puede parecer algo malo, ya que es posible que provoque sentimientos negativos.
Sin embargo, es un paso realmente importante, ya que devuelve la responsabilidad a tus manos, lo que te capacita para dar el siguiente paso.
Tener un plan
Los recuperadores naturales no se limitan a borrar la adicción de sus vidas.
En su lugar, elaboran un plan y lo siguen. Al eliminar la adicción de la vida, estas personas tienen la oportunidad de estructurar su tiempo libre. Hacer y cumplir el nuevo horario les mantiene ocupados.
Invertir en un desafío
Como recompensa por hacer la actividad que desean, los adictos sienten “alegría”. Aunque sea una alegría fugaz que cada vez es más difícil de encontrar después de un tiempo y se emocionan (temporalmente).
Por eso, muchos recuperadores naturales llenan sus agendas con aficiones nuevas y desafiantes.
Aprender algo relativamente difícil desde cero capta la atención de una persona, y tener éxito en ello supone una recompensa de alegría. Aunque un tipo de alegría diferente y más duradera.
Mientras tanto, el sentido de la autoestima también recibe un impulso muy necesario.
Adoptar una actividad física regular
La actividad física es muy gratificante.
Cuando hacemos ejercicio, nuestro cuerpo produce estimulantes del estado de ánimo que actúan como una especie de antidepresivos.
Esto ha demostrado ser muy útil para lidiar con los sentimientos negativos de muchos adictos. Además, la actividad física promueve la síntesis de endorfinas, lo que nos ayuda a sentirnos bien y saludables.
La terapia es una solución extremadamente útil
Los adictos también tienen la psicoterapia como una opción tremendamente útil para combatir la enfermedad. La terapia es útil para una variedad de grados y etapas de la adicción, y es esencial si la adicción es más severa. Especialmente si va acompañada de otros trastornos mentales.
En este caso, las personas no debéis automedicaros ni tratar de superar los problemas por vuestra cuenta. Con la ayuda de un profesional y un poco de apoyo, los adictos tenéis más posibilidades de superar esta enfermedad y recuperaros completamente.
Un terapeuta podrá ayudar al adicto a hacer introspección y reconocer los impactos negativos que la adicción ha tenido en su vida. Hay varios factores que dictan la duración del proceso de terapia y la mejor opción terapéutica: los efectos de la adicción en la persona, la duración y la gravedad del consumo y el tipo de trastorno adictivo.
Terapia Online – ¿Puedo superar mi adicción?
Tener una adicción es tener un hábito que acaba dominando tu propia voluntad.
Se trata de una dependencia, lo cual hace sentir, a la persona adicta, que si no tiene aquello a lo que está enganchada, siente que no puede seguir adelante.
En Psicología Online Avanzada tratamos las adicciones por vídeo conferencia, sin que esto suponga ningún tipo de limitación.
Sacando todo al partido a las tecnologías llevamos a cabo la terapia, consiguiendo resultados tan buenos como de forma presencial con las ventajas que conlleva la terapia Online.
El objetivo de conseguir una nueva normalidad consiste en aprender a vivir sin la conducta adicta.
Podremos acompañarte y guiarte durante todo este proceso de superación de tu adicción, valorando previamente el sentirnos capacitados para el tratamiento del problema.
Si sufres problemas de adicción, quizás haya llegado el momento de ponerle solución, gracias a las facilidades que desde Psicología Online Avanzada te ofrecemos.
Te esperamos.